La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco del 'Plan de Defensa del Patrimonio Histórico Español', ha desarrollado la operación 'FÓSIL' que se ha saldado con la recuperación de ocho piezas paleontológicas en la pedanía de Inazares, en el municipio de Moratalla, extraídas de forma furtiva por dos personas que han sido denunciadas ante el Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma.

Las actuaciones tuvieron lugar después de que una patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) que prestaba servicio por el paraje denominado Barranco de Inazares, del término municipal de Moratalla, detectara la presencia de dos personas que, presuntamente, estaban buscando y extrayendo fósiles paleontológicos, por lo que procedieron a su identificación y a la comprobación de los efectos que portaban.

La inspección realizada por la Benemérita permitió comprobar que, hasta ese instante, habían extraído ocho fósiles de caracolas de distintos tamaños y que los dos identificados carecían de la preceptiva autorización del Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma, según informaron fuentes de la Guardia Civil en un comunicado.

Tras comprobar pormenorizadamente los trabajos llevados a cabo por los dos identificados, como el método empleado para la extracción, las herramientas utilizadas, las piezas obtenidas y los posibles daños ocasionados al yacimiento, se levantó acta de decomiso de los fósiles y se procedió a redactar la correspondiente denuncia por una supuesta infracción administrativa a la Ley 4/2007, del Patrimonio Cultural de la Región de Murcia, que establece la necesidad de disponer de la preceptiva autorización para realizar este tipo de actividades.

Las actuaciones han sido remitidas a la Dirección General de Bienes Culturales de de la Comunidad Autónoma, a cuya disposición han sido puestos, además, los fósiles intervenidos.