­Los servicios de reparto de alimentos en el Huerto de la Rueda para los damnificados han detectado que el número de personas que ocupa el citado recinto aumenta cada vez que se inicia la distribución de la comida, ya sea por la mañana, durante el mediodía o por la noche.

Por este motivo, se está identificando a las personas que acuden a comer gratis a los campamentos. Al poner en marcha esta medida se comprobó un descenso considerable en el número de personas que piden alimento. También se ha detectado que hasta el recinto ferial de Santa Quiteria acuden personas de otras poblaciones cercanas, lo que se pretende evitar a toda costa.

Por otra parte, el jueves por la noche durmieron al raso varias familias en el Huerto de la Rueda, pese a disponer de tiendas de campaña con sus correspondientes camas.

Algunos de ellos manifestaron a esta redacción que nadie les había dicho nada y que habían encontrado dificultades para encontrar una tienda de campaña. No obstante, fuentes de la organización señalaron que hay tiendas suficientes y recuerdan que existen otras tres zonas en la ciudad donde también se han instalado instalaciones de este tipo.

A todo ello, el alcalde de la ciudad, Francisco Jódar, anunció ayer que su intención es que las familias damnificadas por el terremoto no sigan viviendo por mucho tiempo en esas condiciones. En ese sentido, anunció que va a convocar a los promotores y responsables inmobiliarios para elaborar un censo sobre viviendas en alquiler para que puedan ser ocupadas por las familias.