­El «lamentable» estado de deterioro en el que se encuentra la vieja iglesia de San Pedro, ubicada en el barrio del mismo nombre, fue objeto ayer de las críticas de la concejala del grupo municipal socialista, Isabel Casalduero. Según la edil, en este lugar se acumulan basuras e incluso sirve de cuadra para un pequeño poni.

Casalduero pide que, al menos, se consoliden los elementos con mayor riesgo de desprendimiento que existen para evitar accidentes, dado que «se trata de una zona muy frecuentada por niños».

Colchones, basura de todo tipo y la presencia de roedores «es algo muy habitual en la zona», según la concejala socialista, quien reconoce que se trata de un inmueble que se encuentra en las obras contempladas del Plan Integral de Barrios Altos (PIBAL). Mientras tanto, Casalduero considera que se deben llevar a cabo actuaciones de emergencia para detener el deterioro, para garantizar la seguridad de los vecinos y sobre todo, «para evitar accidentes de los que tener que lamentarse después».

La edil socialista reconoce que se está actuando sobre otra de las ruinas, la iglesia de Santa María, y que hace meses deberían haber empezado las obras en la de San Juan. «La zona se ha convertido en un auténtico vertedero y se debe actuar cuanto antes». En este sentido, ha dicho que «se deben consolidar elementos en el templo que corran riesgo de desplome y evite que puedan caer al suelo nuevas zonas del inmueble».