Que Cieza contara con un hospital era algo que en la década de los 80 no estaba contemplado en los planes del Gobierno de España, que en aquellos años ostentaba las competencias sanitarias a través del Insalud. Sin embargo, en Cieza y en el Gobierno regional murciano de principios de los años 90, sí había alguien que apostaba y que quería un hospital para Cieza, que además era su pueblo natal. Ese hombre era Lorenzo Guirao Sánchez, fallecido en agosto del año pasado. "Era una persona de gran valía profesional y de extraordinaria categoría humana". Así lo definió ayer viernes el presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, durante el acto que se desarrolló en el centro hospitalario ciezano, cuyo edificio ha sido rebautizado con el nombre de Hospital de la Vega Lorenzo Guirao.

En 1988, un grupo de personas encabezadas por el médico local Pascual Lucas constituyó la denominada Plataforma Pro-Hospital de Cieza, de la que luego cogería las riendas el vecino Carmelo López. Este movimiento vecinal trasladó a Lorenzo Guirao, que por entonces era coordinador del grupo regional de salud, la necesidad de que la comarca de la Vega Alta tuviera un hospital. Desde entonces, Guirao se puso a trabajar y consiguió, una vez dentro del Ejecutivo regional como consejero desde 1991, las partidas económicas necesarias para construir el edificio, que iba a estar concluido cuatro años después.

Valcárcel recordó la figura de este ciezano, que falleció prematuramente con tan sólo 52 años, y destacó su valía profesional, "porque Lorenzo era un gran médico y un excelente investigador, cuyos resultados son aplicados hoy en día en todo el mundo", indicó el presidente.

Al acto también asistieron el delegado del Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, el secretario general de los socialistas murcianos, Pedro Saura, y la consejera de Sanidad, María Ángeles Palacios.