El ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino ha dado un primer paso para recuperar la finca ciezana de El Menjú, un espacio de gran interés paisajístico ubicado en Cieza, en la margen derecha del Segura.

El Ministerio quiere de esta forma recuperar la titularidad del aprovechamiento hidroeléctrico de la zona (donde antaño hubo una importante central que ahora está inutilizada) y para ello ha abierto un expediente para la posible extinción de los derechos de explotación del mismo.

La resolución señala que este aprovechamiento está inscrito a nombre de Salvador Moscó y otros pero que quien realiza la explotación es la empresa Iberdrola Renovables, a la que se puede considerar la legítima titular del mismo. En la resolución del Ministerio se revela que el aprovechamiento hidroeléctrico "se encuentra en estado de abandono y ruina desde hace muchos años".

La resolución, publicada el pasado sábado en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM), da a los interesados un plazo que termina a finales de noviembre para presentar alegaciones.

Actualmente, la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), es propietaria de parte de El Menjú, mientras que el resto está en manos privadas. El presidente de la CHS, José Salvador Fuentes Zorita, ha mostrado en diferentes ocasiones su disposición para colaborar con las distintas administraciones en aras de conservar y poner en valor la zona.

El aprovechamiento hidroeléctrico de la finca dejó de utilizarse hace varias décadas. La central, hoy en ruinas, fue la que permitió que Cieza tuviera iluminación eléctrica por primera vez.

El Menjú sufrió en el año 2005 un grave incendio que asoló parte del arbolado. Desde entonces, éste es el primer y único paso que se ha dado desde las administraciones públicas para intentar salvaguardar la zona, en la que cohabitan más de 200 especies animales y vegetales y en el que podría anidar la nutria a través del corredor natural con el Cañón de Almadenes.

La finca de El Menjú fue comprada a principios del siglo XX por el diplomático Juan Payá, un hombre viajero que estaba relacionado con altos cargos y que ideó la creación de una especie de jardín botánico en Cieza. Además, en el interior de este jardín natural, en el que Payá introdujo hasta plantas exóticas, existe un paseo con columnas de mármol, estatuillas y varias pequeñas placetas. En una de ellas, hay un reloj de sol que fue construido en el suelo con azulejos.