El delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, asistió ayer al pleno extraordinario celebrado en Moratalla con motivo de la concesión de honores a María Eugenia Moreno Martínez, la doctora asesinada brutalmente el pasado mes de marzo, mientras llevaba a cabo sus tareas profesionales en el centro de salud.

Los familiares de la doctora recibieron la distinción de Hija Adoptiva de Moratalla a título póstumo. Asimismo, se otorgó la distinción de Hijo Predilecto al conductor de la ambulancia, Juan Miguel Moya, que también resultó herido de bala en su intento de defender a la médica, y Mención Especial de la Corporación a los tres policías locales que intervinieron en dicho suceso, reduciendo al agresor.

Luego se inauguró un jardín situado frente al centro de salud, que llevará por nombre ''Doctora Mª Eugenia Moreno Martínez'', en el que se ha instalado un monolito en recuerdo a su persona.