Muchos infractores 'se van de rositas' por este fallo de la DGT

El nuevo sistema de detección de drogas en las carreteras es imperfecto y provoca que muchas propuestas de sanción se queden en nada

El lío de la DGT con los tests de drogas muchos conductores se van de rositas

El lío de la DGT con los tests de drogas muchos conductores se van de rositas

Cuando se implanta un nuevo sistema, es natural que se detecten fallos operativos. Es lo que está ocurriendo con los tests de drogas de la DGT, y se tiene constancia de que este organismo está trabajando para subsanar esos fallos.

La cadena de custodia de las muestras de saliva es la clave

Concretamente, los fallos se producen en el proceso de custodia de las muestras de salida obtenidas de los conductores que son sometidos a controles de drogas. Estos son los fallos detectados:

  • Los agentes no aportan certificación de que se ha cumplido con las normas de la cadena de custodia de las muestras
  • Algunas muestras permanecen durante más de dos semanas en transporte o almacenadas
  • Las muestras aportadas como prueba no coinciden con las obtenidas en su momento por el agente

En cualquiera de estos casos, la consecuencia es la misma: si el propuesto para sanción por conducir drogado recurre, ganará el recurso, bien ante la propia DGT o posteriormente en los tribunales de justicia.

Los datos

En este sentido, un responsable de Dvuelta, una empresa especializada en recurrir sanciones de tráfico, afirma que esta firma ya ha conseguido anular varios procedimientos relacionados con el consumo de drogas al volante la DGT.

El portavoz de Dvuelta añade que en todos esos casos se han producido fallos relacionados con la cadena de custodia de las muestras obtenidas.

La DGT debe mejorar su sistema de custodia de muestras

¿Esto significa que estamos ante un proceso generalizado de dejadez o descuido en la custodia de las muestras? En absoluto: lo más probable es que se trate de fallos causados por la falta de experiencia operativa en estos complicados procedimientos.

Lo que sí que es seguro es que la DGT está implicada en el perfeccionamiento del procedimiento de custodia y que, más pronto que tarde, se conseguirá el objetivo de que quienes conducen bajo los efectos de alguna droga paguen las consecuencias de su temeridad y de su imprudencia.