Comprarse un coche sigue siendo un acto importante en nuestras vidas. Tras el confinamiento y los cambios inminentes de tramos impositivos, el mercado ha entrado en una fase irregular que ahora se ha visto agravada por la crisis de los microchips, lo que ha provocado un cruce de tendencias entre oferta y demanda. 

En este terreno de la demanda, los análisis de los datos de la Agencia Tributaria revelan que el precio de los vehículos se ha incrementado en un año. Lo ha hecho algo más de un 7%, por lo que los ingresos a las arcas estatales también han subido.

El precio medio de los vehículos matriculados en septiembre (incluyendo el importe del impuesto de matriculación) fue de 21.201 euros, lo que supone una subida del 10,7%, mientras en lo que va de año aumentó hasta los 20.371 eurosun 7,2% más que en el mismo periodo del año anterior.

Mayor recaudación

La recaudación por el impuesto de matriculación, tasa transferida a las comunidades autónomas, ha crecido también. Esto demuestra la tónica ascendente, no de las ventas (el mercado ha caído un 15,7% hasta septiembre), sino de los precios de los vehículos que se comercializan en España. La cifra recaudada por el impuesto se situó en 390,2 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, lo que implica un aumento del 47,31% en comparación con los 264,88 millones de euros del mismo período del año anterior, según datos facilitados por la Agencia Tributaria.

Durante el pasado mes de septiembre las comunidades autónomas ingresaron 20,59 millones de euros por el impuesto de matriculación, lo que representa una disminución del 39,4% en la comparativa con los 33,95 millones de euros registrados en el mismo mes del año pasado.

Se da la circunstancia que en 2020 se produjo un alza de las ventas motivada por la inminente modificación del valor del impuesto por la entrada en vigor de la normativa medioambiental europea de emisiones (aunque después de fijó una moratoria hasta final de este año). Eso supone que el 1 de enero volverá a aplicarse la normativa de los 95 gramos, aparcada temporalmente por ahora.

Si vemos lo que ha ingresado de media el Estado desde enero hasta septiembre (periodo publicado por la Agencia Tributaria) por cada vehículo la cifra es de 615 euros, un 57,3% más, mientras que en el pasado septiembre fueron 285 euros, un 28,75% menos.

El margen que los fabricantes fijan ahora por cada coche vendido es mayor dado el mayor nivel de precio de los vehiculos. Eso, ante la escasez de oferta (la crisis de los microchips ha incrementado hasta 9 meses los plazos de entrega), implica una ganancia inmediata ya que el comprador puede variar su elección y apostar por un vehículo más caro si con ello encuentra disponibilidad inmediata.