El Grupo Volkswagen lanzará una serie de coches urbanos eléctricos a mediados de esta década que tendrá la misión de democratizar la movilidad eléctrica. Coches que arrancarán en los 20.000 euros y facilitarán su acceso a las masas. Esta semana, Múnich ha sido el escenario que ha visto nacer a dos de estos vehículos: el Volkswagen ID. Life, presentado en el Salón de Munich, y el Cupra UrbanRebel Concept, un prototipo que adelanta las bases estéticas del que será el urbano de Cupra. En este caso, la firma catalana lo presentó en el Cupra Garage de la ciudad bávara, inaugurado aprovechando la celebración de la muestra alemana.

El Cupra UrbanRebel Concept es un prototipo que, según asegura la marca, anticipa algunos rasgos de diseño, aunque llega vestido de coche de competición, del que será su versión de producción, que será ensamblada en la planta de Martorell. De hecho, la voluntad de Cupra y SEAT es la de producir más de medio millón de coches eléctricos urbanos en Martorell cada año para distintas marcas del grupo, como podrá ser, por ejemplo Skoda, Seat y la misma Cupra. «El coche eléctrico urbano hará accesible la electromovilidad para las masas», asegura Wayne Griffiths, consejero delegado de Cupra. De momento, Audi queda fuera de la ecuación y no adjudicará modelos a Martorell. El ID. Life de Volkswagen se producirá en Navarra.

Adelanto estético

El UrbanRebel concept es una «interpretación radical» de lo que será ese coche que producirá la marca en 2025. Según Griffiths, este «prototipo de carreras aporta una idea del lenguaje estético del futuro vehículo». Mide apenas 4,08 metros de largo, por lo que es más corto que el Arona y apenas tres centímetros más largo que el Ibiza, y se basará en la modificación que Seat está desarrollando de la plataforma MEB del Grupo Volkswagen para coches eléctricos pequeños.

Con el prototipo, Cupra ha elevado su sentido radical del diseño a lo extremo. Es extrañamente fluido en sus formas, para ganar aerodinámica, pero dispone de múltiples elementos que rompen con esa fluidez para dotarlo de agresividad, como el paragolpes delantero, las llantas, los faldones laterales o el enorme alerón trasero, que además integra los grupos ópticos traseros. Hay ciertas soluciones de diseño que llaman la atención, como la forma del parabrisas y las ventanillas, que recrean la forma de la visera de un casco, o como la forma de «nariz de tiburón» que tiene su frontal, gracias a una superficie negativa y la forma triangular de sus grupos ópticos. Son elementos que recuerdan al Cupra Tavascan, pero con un aspecto mucho más radical en el UrbanRebel.

Cupra dice que acelera de 0 a 100 en 3,2 segundos gracias a un motor de 429 CV de potencia. No hay detalles sobre la batería y, de su versión de producción solo se sabe que «ofrecerá un diseño sorprendente y un dinamismo increíble».