Mucho y bien habíamos oído hablar y leído del "Desierto de los Niños", una iniciativa solidaria patrocinada por Hyundai España que se viene celebrando, ininterrumpidamente, desde hace ahora 15 años. Así que, cuando recibimos la invitación de Hyundai para experimentar en propia carne -y la de nuestros hijos- las sensaciones que producía, no lo dudamos ni por un instante. Así, a bordo de un inmaculado Hyundai Santa Fe 2.2 CRDi 4x4 Automático -cuya única modificación era la sustitución de las llantas de 19´ por otras de 18´calzadas con neumáticos mixtos Kumho y pintadas de un espectacular color naranja- nos hemos hecho cerca de 3.000 km recorriendo Marruecos y buena parte del sur de España, disfrutando de las emociones que produce ayudar a gente muy necesitada y de la confortable y versátil conducción del sorprendente Santa Fe.

Tras cargar nuestro Santa Fe para cuatro adultos y sus enseres para toda una semana -una baja de última hora dejó en tres los adultos que en él viajamos- partimos hacia Tarifa (Cádiz) donde un ferry nos trasladaría a Tánger, lugar de partida de una expedición que se reveló muy numerosa. Nada menos que 60 vehículos y 207 personas, de las cuales 66 eran niños menores de 14 años -récord histórico de participación-. De entre toda esa caravana nuestro Santa Fe y el conducido por Javier Carreras, gerente de Gasmóvil -concesionario oficial Hyundai en Murcia, perteneciente al Grupo Terramóvil-, y 5 adultos más dos niños, representábamos orgullosamente a la Región de Murcia.

El viaje hasta Tánger nos reveló el elevado confort, la bajísima rumorosidad -pese a los neumáticos mixtos- y el mucho espacio disponible en el interior y el maletero de nuestros Santa Fe. Destacar también los bajos consumos obtenidos, pese a lo vivo de nuestro ritmo y lo cargado de nuestros coches, con medias un poco por debajo de los 9,0 litros por cada 100 km.

Tras conocer los detalles de la compleja logística del viaje, excelentemente organizado por nuestro compañero en labores informativas, copiloto dakariano y aventurero nato, Nacho Salvador y su dimensionado y profesional equipo, arrancamos una primera etapa de más de 600 km donde nuestros Santa Fe confirmaron sus capacidades y, como pudimos comprobar, los Kona y Tucson que completaban la caravana también rindieron a un excelente nivel. Incluso el furgón H-1, de la gama de industriales de Hyundai, alardeó de un alto confort, mucho espacio y contenidos consumos.

Marrakech fue la primera escala del viaje, para a continuación cruzar el Atlas camino de Boulmane Dades, pasando por el alto de Tichka y por Ait Ben Haddou, visita obligada camino del sur. En la tercera jornada, cuyo destino era la localidad de Tafraoute, se tuvo el primer contacto con las pistas, en una etapa en la que había un poco de todo: con ríos secos en los que hubo varios atascos, zonas de piedras y un enorme lago seco que daba acceso a un pequeño oasis, donde los niños se encontraron la primera sorpresa del viaje en forma de piscina, algo que vino muy bien en una jornada muy calurosa. El día finalizaba con la jornada de convivencia entre niños españoles y marroquíes, compartiendo juegos. Además, este era el primer punto en el que trabajaban las ópticas de la Fundación Alain Afflelou -revisaron la vista a más de 700 niños, adultos y ancianos a lo largo del viaje- y donde el camión de Bujarkay dejaba material.

La cuarta jornada comenzaba con una larga caravana con los 60 vehículos del viaje juntos, para trasladarse hasta la localidad de Fezzou. Allí se inauguraba la Escuela Hyundai -Federico Granda, que se ha construido a lo largo del año gracias a una iniciativa de los concesionarios Hyundai, que donaban 5 euros por cada persona que se acercase a un concesionario a probar un vehículo de la marca en unas fechas determinadas. El resultado de esta acción es una escuela nueva y moderna para los niños más pequeños de la zona (hasta 5 años). Además, y gracias a otra iniciativa de Hyundai, se ha construido una biblioteca en la localidad, aprovechando el local que quedaba vacío gracias a la construcción de la nueva escuela. En el camión "viajaban" los muebles, ordenadores, diccionarios y libros, entre otros, que conformarán la biblioteca de la localidad. Entre todos se montaron mesas y estanterías para dejar la biblioteca en orden de marcha.

A principios de 2019, la red de concesionarios Hyundai lanzaba una nueva campaña de recaudación de fondos, esta vez con el lema "Agua en el desierto". Gracias a los 5.538 test drives realizados, se ha recaudado un total de 26.690 euros, que se destinarán a llevar agua a una pequeña localidad del desierto. Esta acción se realizará durante el año y se inaugurará en la edición 2020 de El Desierto de los Niños, aunque los participantes de la edición 2019 sí pudieron ver la zona donde se realizará el pozo, zona en la que se circuló durante muchos kilómetros por un largo río de arena, lo que aportó un plus de diversión al volante de los coches, además de permitir probar las excelentes cualidades de los sistemas de tracción 4x4 de la gama Hyundai.

Muy emotiva fue también la entrega de material a la Association Tafilalet de discapacitados de Erfoud y que fue el colofón a esta decimoquinta edición del Desierto de los Niños, que ya está trabajando en su edición 16.

En resumen un viaje fantástico que ha puesto de manifiesto muchas cosas, desde la belleza de los parajes marroquíes, hasta el intenso desarrollo que vive el país en los últimos años, pese a las muchísimas necesidades que aún sufre; a las virtudes de una gama SUV, como la de Hyundai, que destaca por sus cualidades dinámicas, su elevado confort y buen rendimiento y, como bien pudimos comprobar, sus sorprendentes capacidades off-road. O lo bien que sienta ayudar a los que realmente lo necesitan.

Felicitamos a Hyundai por esta excelente iniciativa e invitamos a todos nuestros lectores a que se apunten a vivir una experiencia tan gratificante como enriquecedora.