Estudios recientes revelan que alrededor del 70 % de las personas que suelen viajar en coche se ven afectadas por el mareo. Jaguar y Land Rover han decidido tomar cartas en el asunto y han analizado el comportamiento de pasajeros propensos al mareo durante más de 15.000 millas, con el fin de mitigar en sus futuros vehículos los patrones causantes de ese malestar. Con este estudio y personalizando el estilo de conducción del vehículo y las preferencias de conducción, se han reducido los efectos en un 60 % de los casos.

Para detectar esos mareos se utilizan sensores biométricos que registran varias señales fisiológicas, combinándolas con datos sobre el movimiento y la dinámica del vehículo para saber cuándo el conductor o los pasajeros empiezan a sentir mareos o incluso detectarlos antes de que se produzcan.

En este sentido ya los modelos actuales de Jaguar y Land Rover están preparados al contar con multitud de regulaciones en los asientos, climatización interior y una dinámica inteligente que suaviza los movimientos indeseados de la carrocería.