Santano compareció hoy durante más de una hora y cuarto ante la titular del Juzgado de Instrucción número 35 de Madrid, Gema Gallego, que mantuvo su condición de imputado por un presunto delito de falsedad, por la supuesta alteración de un informe elaborado por tres peritos químicos en el que se relacionaba ETA con el 11-M.

Los peritos se referían en su informe al hallazgo en diciembre de 2004 de ácido bórico en Lanzarote, en la vivienda de uno de los imputados por el 11-M, Hassan el Haski, así como en un piso franco de ETA en Salamanca, en 2001.

Según fuentes jurídicas, el comisario general, que se encontraba de vacaciones cuando ocurrieron los hechos, avaló hoy la decisión de su sustituto de suprimir el capítulo de observaciones del informe que los peritos elaboraron sobre el ácido bórico, por considerar que eran contrarias al "manual de normas de calidad" y a dos instrucciones del secretario de Estado de Seguridad sobre la elaboración de atestados e informes periciales.

Calificó el informe firmado por los peritos de "borrador cuyo contenido "no eran más que elucubraciones y consideraciones subjetivas sin fundamento científico alguno y que por tanto no debía" ni podrían constar en un informe científico.

Durante sus vacaciones -relató- su sustituto, el secretario general de la Comisaría General de Policía Científica, Pedro Luis Mélida, le comunicó que había habido un problema con un informe que habían elaborado unos peritos y que, tras haberles comunicado que debían de modificarlo, se habían negado a ello.

Esta comunicación -agregó Santano- se realizó porque "es inhabitual que un perito se niegue a modificar un informe" y agregó que Mélida le explicó que el asunto ya estaba resuelto.

Relató que no se le hizo saber que el informe era relativo al 11-M y que aunque le explicaron que los peritos se negaban a quitar unas observaciones del mismo, no le concretaron cuáles eran éstas.

Santano señaló que no sabía de ningún caso en el que los peritos se negaran a modificar los informes pero tampoco en el que se haya dado la orden al perito de cambiarlos.

También consideró normal que finalmente el informe fuera firmado por Francisco Ramírez, jefe de sección de la Unidad de Análisis de la Policía Científica, y aportó a la juez jurisprudencia del Tribunal Supremo que avala que los informes sean firmados por un sólo perito.

Explicó a la juez que hay numerosas sentencias del Supremo que abundan en que un informe pericial lo emita sólo un perito cuando sea un laboratorio oficial.

También dijo que el hecho de que éste no realizara las pruebas de las muestras "no equivale a no hacer el informe" y se remitió al manual de normas de calidad.

Ramírez está también imputado por la juez por un delito de falsedad documental.

Además de Santano y Ramírez, ha declarado ya también ante la juez -también como imputado- el secretario general de la Comisaría General de la Policía Científica, Pedro Luis Mélida.

El comisario general, que acudió a la declaración acompañado por el secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José Manuel Sánchez Fornet, declinó realizar comentarios a los periodistas tras su comparecencia ante la juez, durante la que no respondió a las preguntas de la acción popular.

Según fuentes del SUP, Santano está "tranquilo" y convencido de que ha aplicado las normas como debía hacerse y como se han aplicado siempre en la Comisaría General.