En un comunicado, Abás califica lo ocurrido de "horrible masacre" y pide al Consejo de Seguridad que se reúna para "acabar con la matanza, determinar responsabilidades e imponer un severo castigo a Israel".

Mientras tanto, el Gobierno palestino se ha reunido en sesión de emergencia bajo la presidencia de Haniye, quien anunció que "en un gesto de protesta por lo ocurrido, se suspenden de las conversaciones para formar un gobierno de unidad nacional".

El Gobierno ha decretado tres días de luto por los ataques israelíes ocurridos en Gaza, donde han muerto 18 personas y en Cisjordania otras cinco.

Por su parte, el Movimiento islamista Hamás de Haniye, a la par que ha pedido la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, ha apelado también a que se expulse a un "Estado brutal y animal como es Israel" de la organización.

Un portavoz de Hamás anunció además que su movimiento va a lanzar "misiles contra Israel y que mártires van a penetrar muy adentro del territorio enemigo para sacrificar sus vidas".

"Todos nuestros mártires están esperando. La venganza esta por llegar", dijo Nizar Rayan, líder de Hamás en el norte de Gaza.

Igualmente, la Yihad Islámica ha apelado a acciones terroristas en un comunicado en el que anuncia que "los mártires están en marcha y que la respuesta no tardará. Ha llegado la hora del castigo y de la venganza".