ElPozo Murcia superó ayer con un espectacular Álvaro al Kairat Almaty de Kazajistán, el obstáculo más difícil en su camino hacia el primer puesto, y consiguió el pase directo a la Final Four, la primera vez que llega a la final de la máxima competición europea.Y es que el equipo anfitrión, el Gödöllöi, cayó derrotado en casa frente al Dorozhnik Minsk, y sólo en la última jornada el equipo bielorruso o el kazajo podrían empatar a puntos con los murcianos, en caso de que éstos perdiesen. Sin embargo, en caso de empate a puntos se cuenta el enfrentamiento directo, y ElPozo ha ganado a ambos.

El plantel de jugadores brasileños del cuadro kazajo, el rival más duro del grupo, llegó a hacer sufrir al campeón español, que dispuso de todos sus efectivos tras recuperar a Wilde y a Cobeta, ausentes en la primera jornada frente al Dorozhnik Minsk.

Bacaro lideró en los primeros instantes de partido una oleada de ataques murcianistas. El italobrasileño se encontraba muy inspirado tras los tres goles anotados en la jornada anterior. El cuadro de Duda salió mucho más incisivo, aunque no lograba marcar.

En ElPozo prevalece la colectividad sobre los individuos. Sin embargo, un nombre volvió a destacar sobre el resto: Wilde. Y el brasileño, tan eléctrico y genial como de costumbre, fue quien abrió el marcador tras un gran pase de Álvaro.

Pero entonces el Almaty empezó a jugar a un ritmo infernal los últimos minutos de la primera parte. Sus jugadores se asociaron por todas partes, siempre con mucho peligro sobre la portería de Juanjo y con una clara referencia, Cacau, y otros tres brasileños arropándolo. De ahí, y de un error de Vinicius surgió el gol del empate, obra de Picapau, con el que se llegó al descanso.

El encuentro continuó como había terminado el primero. El conjunto kazajo saltó con ritmo a la cancha y mucho más ambicioso en el segundo tiempo. Cacau lideró la reacción y dirigió las embestidas del cuadro de Fail Saab.

Sensacional Álvaro

Pero el acelerón no duró demasiado, del ánimo pasó a la imprecisión en cuestión de minutos. Su sueño de acceder a la Final Four pasaba por ganar o incluso empatar, pero se fue desvaneciendo paulatinamente hasta que finalmente se desplomó.

Álvaro, con una nueva actuación sensacional, fue el artífice de evaporar las esperanzas kazajas. Marcó los dos goles que dieron la victoria al conjunto murciano y ya había dado la asistencia del primero. Sencillamente magnífico.

ElPozo no dio opciones y sí una práctica de cómo conservar la pelota, sabe que la Copa de Europa no es un objetivo descabellado y ya tiene más que aprendida la lección de hace dos temporadas, cuando cayó eliminado ante el Dinamo de Moscú en el último encuentro, lo que le privó de jugar la final frente al Charleroi.

Incluso pudo haber hecho más a poco que hubiera afinado la puntería, mientras, el Kairat Almaty inició un juego marrullero fruto de la desesperación. Wilde, quien volvía a jugar con el equipo después de superar unas molestias musculares, fue el único perjudicado: recibió un codazo de Waguinho en la cara y poco después tuvo que ser retirado en camilla tras recibir una tremenda patada de Etienne. El brasileño de ElPozo fue trasladado a un hospital de Budapest y se le diagnosticó una rotura de tibia y peroné sin desplazamiento, lo que le mantendrá apartado de los terrenos de juego entre ocho y diez semanas.