A los ingenieros de Honda, el nuevo Civic les ha salido redondo. Bien con la vistosa carrocería de cinco puertas o bien con la estilizada sedán de cuatro, y con cualquier propulsor de su gama (atención a la versión Type-R de la que ya dimos cuenta hace poco en estas páginas, uno de los compactos deportivos más apasionantes que hayamos probado hasta la fecha), la nueva hornada del polivalente japonés destaca y mucho.

Nuestro protagonista de hoy es el formato sedán de cuatro puertas con el nuevo motor diésel de 1,6 litros i-DTEC de 120 CV, que se une a la oferta de gasolina de 129, 182 y 320 CV.

Motor

Hay que decir que el propulsor de gasóleo, proyectado especialmente para el público europeo, nos ha encantado por su baja rumorosidad, su consumo irrisorio y también por la respuesta elástica y viva que ofrece. Eso hace que no tengamos que recurrir demasiado al cambio de marchas que, por otro lado conserva el delicioso tacto de los hermanos de gasolina (a finales de año llegará una variante automática a este propulsor con nueve relaciones). Aunque no ofrece la gratificante zona alta del cuentavueltas de los 1,0 l. de 129 CV y 1,5 l. de 182 CV, el nuevo diesel mueve al Civic Sedán con mucha soltura, apenas se deja notar, incluso arrancándolo en frío, y nos premia con gasto medio homologado de 3,4 litros por cada 100 km (un litro y pico más de media en nuestras pruebas, aun así muy contenido).

En cuestiones de dinámica, el Civic Sedán 1,6 i-DTEC tiene un comportamiento muy estable, con unas reacciones neutras y seguras, que hacen que tengamos confianza para ir rápido en tramos lentos. Mención especial merece su dirección, que está a la altura del adictivo tacto del coche y que nos permite trazar giros con precisión milimétrica.

Habitáculo

Otra de las bazas de este modelo es su interior. Terminado con buenos materiales, el puesto de mandos permite sentarnos muy abajo, algo que, aunque no es muy cómodo a la hora de entrar y salir, aumenta la sensación deportiva al volante. El resto de las plazas gozan de buena habitabilidad, también en la bancada trasera, que destaca por lugar para las piernas gracias a la generosa longitud del coche (4,63 metros) y, sobre todo a su distancia entre ejes (nada menos que 2,70 metros, mas propio de una berlina mediana). Completa el interior un enorme maletero de 520 litros de capacidad (unos 40 litros más que la variante de cinco puertas).

En dispositivos, el Civic cuenta con un sistema multimedia con pantalla táctil de hasta 7 pulgadas y total conectividad con protocolos Android Auto y Apple CarPlay y ademas acceso a internet. Hay otra pantalla para el tablero de instrumentos, con unas gráficos vistosos y bien legibles, y más elementos de dotación, como el climatizador automático, el freno de mano por botón o la alarma.

La versión diésel de Civic Sedán abarca las tres versiones disponibles: Comfort, Elegance y Executive. Con el nuevo motor diésel de 1,6 litros y 120 CV, el Civic Sedán acelera desde parado hasta los 100 km/h en 10 segundos y alcanza una punta de velocidad de 201 km/h. El consumo medio que homologa es de 3,4 litros por cada 100 km y las emisiones son de 91 gr/km de CO2 De serie y desde el acabado de base encontramos las llantas de 16 pulgadas, el equipo multimedia con pantalla de 5 pulgadas con Bluetooth, el conjunto de elementos de seguridad Honda Sensing que puede evitar una colisión con la frenada automática, avisa de la salida involuntaria de carril y mantiene la velocidad y la trayectoria. Si subimos de nivel aparecen la pantalla de 7 pulgadas mencionada para el equipo de infoentretenimiento con navegación, los faros de Led o las llantas de 17 pulgadas, entre muchos otros. Los precios del Honda Civic 1.6 i-DTEC de 120 CV parten desde los 24.850 euros.