Nuevo ´crossover´ urbano para una categoría muy reñida. El nuevo Kia Stonic está pensado para los que buscan un modelo práctico y compacto, sin sacrificar mucho espacio interior, y con una estética agraciada de pequeño ´SUV´. Tiene una longitud de 4,14 metros y su habitáculo ofrece buenas cotas (incluso en altura) y un maletero de 352 litros de capacidad.

Pero antes de desgranar los pormenores del nuevo modelo de Kia, bien merece un repaso el buen momento en el que se encuentra la firma en nuestro mercado. Con casi 39.000 matriculaciones en España en lo que va de año (que supone una cuota de mercado del 4,8 % y un crecimiento del 5 %), la marca estima cerrar este 2017 con unas 60.000 unidades vendidas, lo que le mantendría en el tercer puesto dentro del canal de particulares. Artillería no le falta, pues este ejercicio está plagado de novedades, como la presentación el pasado abril del modelo Rio, al que le siguió el Picanto a principios de verano; la cosa no queda aquí, porque al recién llegado Stonic le acompañará el mes que viene la esperada berlina Stinger, que vendrá a reforzar la imagen de la marca frente a sus contrincantes.

Pero, sin adelantar acontecimientos, nuestro protagonista, el Stonic, llega a un segmento denominado ´B-SUV´, (es necesario ir diferenciando categorías dentro de los diferentes formatos, teniendo en cuenta el caos de modelos que pueblan los escaparates), que no ha dejado de crecer en los últimos años (de hecho es el de mayor crecimiento en nuestro mercado), y como muestra, un botón: cerró el año pasado con casi 126.000 unidades vendidas y se estima que el 2020 bien superará las 153.000 matriculaciones. Por eso es interesante tener presencia en la categoría de moda, al tiempo que se completa una gama ´SUV´ que tantos éxitos le ha dado a Kia.

La familia de motores que se propone para el nuevo Stonic consiste en dos de gasolina, un 1,2 l. de 84 CV (5,2 l./100km) y un 1,0 l. Turbo con 120 CV (5 l./100 km), y un diésel de 1,6 l. con 110 CV (4,2 l./100 km). De momento, la caja de cambios prevista para los tres casos es manual, aunque el año que viene se prevé la automática de doble embrague para el 1,0 l.

Las líneas de dotación para España son Concept, Drive y Tech. El primero de ellos monta elementos como barras en el techo, luces de marcha diurna con Led, iluminación auxiliar en giros, pantalla de 7 pulgadas para el sistema de sonido compatible con ´smartphones´, programador de velocidad con limitador, aire acondicionado y sensor de luces, entre otros. El siguiente nivel Drive suma a lo anterior retrovisores plegables, lunas tintadas, navegación con cámara de visión trasera, climatizador y sensores de lluvia y de aparcamiento delanteros. Por último, el acabado Tech añade el ´Advanced Driving Assistance Pack´ (opcional en las otras dos versiones y que contiene la asistencia de mantenimiento de carril, el detector de fatiga del conductor, el cambio de luces de carretera y cruce automático, la frenada de emergencia y la pantalla de 3,5 pulgadas en la instrumentación), llave inteligente, tapicería exclusiva y pedales de aluminio, entre otros. Las llantas pueden ser de hasta 17 pulgadas.

Los precios parten desde los 12.900 euros del 1,2 l. de 84 CV en gasolina y desde los 14.800 euros del 1,6 l. diésel.