Llegó al mercado en 2013 y poco a poco ha ido convirtiéndose en uno de los modelos más populares de la marca de la estrella. Derivado del siempre exitoso Clase A, aporta un plus de imagen por su aspecto elevado de ´crossover´ sofisticado que además se redondea con el ´glamour´ que Mercedes-Benz sabe imprimir en sus modelos.

Ahora se ha puesto al día con retoques de aspecto y más dotación, pero sin alterar su acertada gama mecánica, que está formada por cuatro propulsores de gasolina (GLA 180 de 122 CV; GLA 200 de 156 CV; GLA 250 de 211 CV y GLA 45 AMG de 381 CV) y dos diésel (GLA 200 d con 136 CV y GLA 220 d con 177 CV). Hay cambios manuales de seis marchas o automáticos de siete, dependiendo del nivel de potencia escogido y la tracción total 4MATIC se asocia con los gasolina de 211 y 381 CV.

Los cambios afectan a la parrilla, las defensas y algunos tipos de llantas. Las ópticas pueden ser de Led para todas las funciones y las luces de frenos y los indicadores de dirección tienen distintos grados de luminosidad en función de la luz ambiental. También se añade un nuevo color ´Canyon Beige´ a la carta cromática de la carrocería. Dentro se añaden nuevas tapicerías y guarnecidos, así como se cambian algunos detalles de la instrumentación (las agujas de los relojes son de color rojo) y mandos.

Aparecen elementos novedosos en su dotación, como el sistema de cámaras que forman una imagen de 360 grados del perímetro del vehículo, para que las maniobras se hagan con mayor seguridad. Asimismo la pantalla del salpicadero de 8 pulgadas destaca en un interior más acogedor por la renovada calidad de los materiales empleados que también se firman con detalles cromados. Otra posibilidad novedosa es el acceso y arranque sin llave, que va aparejado a un sistema que abre y cierra el portón trasero deslizando un pie por debajo del paragolpes.

Los cambios mencionados de algunos elementos de la carrocería, como los paragolpes dan como resultado una mejora en aerodinámica (ahora 0,28, antes 0,29) que repercute en un menor consumo de combustible. También se puede elegir entre un tren de rodaje deportivo que rebaja la altura de la carrocería 15 milímetros u otro de corte más ´off-road´ que la sube 30 milímetros.

En cuanto al equipamiento de seguridad, el GLA incluye de serie el asistente de frenado activo, que advierte al conductor si se reduce demasiado la distancia respecto al vehículo precedente y, si es necesario, actúa en la asistencia de la frenada dependiendo de la situación. Si el sistema detecta que el conductor tarda demasiado en reaccionar, inicia una parada autónoma para evitar la colisión o minimizar sus consecuencias. También el sistema ATTENTION ASSIST analiza en la conducción si existe riesgo de sueño al volante y advierte de ese peligro.

Los precios de la nueva gama Mercedes-Benz GLA arrancan en los 31.050 euros del GLA 180; en diésel empiezan en los 33.515 euros del GLA 200 d. La versión deportiva de 381 CV, firmada por AMG cuesta 71.000 euros.