Desde el lanzamiento de la primera GSX-R 750 en 1985, Suzuki cambió el panorama de las deportivas. Nunca una moto de serie estuvo tan cerca de las de competición y, aunque hoy tiene muchas contrincantes y ha evolucionado y se ha refinado muchísimo, mantiene ese genial equilibrio que la coloca como una de las mejores del mercado. Ahora, además, la puedes tener con los mismos y acertados colores que la marca emplea en Moto GP y por un fuertemente promocionado precio de 11.099€euros.

Gracias a nuestro habitual colaborador, Motos Marín -concesionario oficial Suzuki en la Región de Murcia- hemos podido disfrutar de una de las últimas GSX-R 750. Ligera y compacta como una 600, la 750 no asusta, como la 1.000, mientras que sus 150 CV te permiten una conducción mucho más relajada y sencilla que con su hermana pequeña, que te obliga a llevarla siempre muy alta de vueltas para poder andar deprisa.

Así, de esta 750 nos ha gustado, principalmente su equilibrio, es endiabladamente manejable y entra en las curvas casi sin esfuerzo, como si la guiase el instinto de su piloto. También a su equilibrio achacamos lo bien que frena, muy dosificable y con una contundencia final que roza la brutalidad. Aunque no andes muy listo con el cuentavueltas, sus bajos y su estirada te sacarán airosamente de esa curva del circuito o del puerto de montaña que se te atraganta. Su polivalencia también nos ha sorprendido. Si bien estamos ante una superdeportiva ´descarada´, gracias a su postura de conducción o a las bondades de su mecánica, no resulta tan radical y permite un uso diario.

Por último, su promocionado precio la convierte en una de las mejores opciones del mercado en su categoría.