La segunda generación del todocamino de Ford creció para dejar paso a otro formato más pequeño, el modelo EcoSport, a la vez que ganaba practicidad al presentar un interior más desahogado y sumaba aplomo gracias a sus nuevas cotas. Con una longitud de 4,52 metros, el Ford Kuga milita en un segmento cada vez más poblado y competitivo. Aun así ha hecho los deberes en esta entrega y resulta una opción más que recomendable por su equilibrio entre capacidad, eficiencia y comodidad de marcha.

La gama está compuesta por tres variantes diésel de 120, 150 y 180 CV, provenientes de un bloque de dos litros de cilindrada (2.0 TDCI) y dos de gasolina con 150 y 180 CV sacados de un bloque de 1,5 litros EcoBoost. Las cajas de cambios de serie son manuales de seis marchas, y en opción se pueden asociar con un cambio automático de convertidor de par para el 1,5 l. de gasolina o de doble embrague ´PowerShift´ para los diésel, en ambos casos de seis velocidades. La tracción de los gasolina y diésel menos potentes es a las ruedas delanteras, mientras que en el resto es integral. El 2.0 TDCI intermedio de 150 CV se puede elegir tanto en 4x2 como en 4x4. Nosotros hemos podido probar una unidad configurada con el motor de acceso diésel de 120 CV, que implica el cambio manual y la tracción sencilla, suficiente para un uso normal que incluya alguna salida al campo.

Habíamos hecho antes mención a la practicidad porque el Kuga aporta muchos huecos de todo tipo para dejar objetos y además, el espacio en la fila trasera (una pequeña pega del anterior modelo) se resuelve al haber más sitio y contar con regulación en los respaldos. Tampoco el maletero está nada mal con sus 456 litros ampliables hasta los 1.650 litros abatiendo los asientos traseros. Delante el Kuga dispone todo a la mano para el conductor, que encuentra muy fácil la postura idónea y recibe bastante información con el tablero de instrumentos y su pantalla interior. Hay otra pantalla (un poco pequeña) en el centro del salpicadero para el sistema ´SYNC´ del equipo multimedia en la que aparecen los datos de navegación (si lo incluye), fuentes de sonido y conectividad Bluetooth.

En carretera el propulsor 2.0 TDCI de 120 CV demuestra su poder aún con carga. Sale bien desde pocas vueltas y redondea una zona alta todavía con empuje, y eso que el Kuga con esta configuración pesa más de 1.600 kg. El consumo homologado con el cambio de marchas manual es de 4,6 litros por cada 100 km. y emite 120 gr de CO2/km.

En carretera va aplomado y el tarado de las suspensiones contiene mucho los movimientos de la carrocería, lo que da más garantías para ir a un ritmo rápido. Fuera del asfalto puede ir con la confianza de sus 20 cm. de altura al suelo y voladizos razonablemente cortos, aunque hay que tener en cuenta su tracción sencilla y las ruedas que monta, más orientadas para un uso rutero.

Para el listado de dotación, este motor diésel está disponible con los acabados ´Trend´ y ´Titanium´. De serie monta control de velocidad con limitador, ordenador de viaje, climatizador, sistema ´Start&Stop´ de arranque y parada, asistente al inicio de marcha en pendiente, llantas de 17" y antinieblas, entre otros. El otro acabado suma el sistema multimedia ´SYNC´ con manos libres Bluetooth, el climatizador doble y sensores de lluvia y luces, por citar algunos.

El precio de partida de nuestro Ford Kuga 2.0 TDCI de 120 CV, con cambio manual y tracción al tren delantero es de 20.050 euros.

FICHA TÉCNICA

  • Nº de cilindros/disposición 4 en línea/del. transversal Cilindrada (cc) 1.997 Potencia (CV/rpm) 120/3.500 Par máx. (Nm/rpm) 330/1.750-3.000 tracción delantera, cambio manual de seis velocidades Dimensiones largo/ancho/alto (m) 4,52/1,83/1,70 Maletero (litros) 456 Peso (kg) 1.725 Velocidad máx. (km/h) 180 Aceleración 0-100 km/h (seg.) 12 Consumos (urbano/carretera/mixto-l/100 km) 5,1/4,4/4,6