París vivió este domingo un nuevo homenaje a las víctimas de los atentados terroristas del 13 de noviembre de 2015, que causaron 130 muertos y más de 400 heridos y fueron los más graves ocurridos en Francia.

Un cortejo volvió a recorrer, como un "via crucis", los lugares que fueron atacados de formas sucesiva por tres comandos de islamistas formados por nueve hombres, siete de los cuatro murieron esa noche.

El Estadio de Francia en Saint Denis, en la periferia de la capital, varios cafés cuyas terrazas fueron tiroteadas y, especialmente, el local de conciertos y espectáculos Bataclan (donde murieron 90 de las víctimas) fueron visitadas sucesivamente por el cortejo.

La primera ministra, Élisabeth Borne, y la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, encabezaron el homenaje, junto con familiares de las víctimas, entre los que hubo muchos gestos de emoción..

No hubo intervenciones públicas, ya que le ceremonia debía estar marcada por "la sobriedad, la dignidad y el recogimiento", explicó antes del inicio la jefa del Gobierno.

"Hoy, domingo 13 de noviembre de 2022, París se acuerda", señaló en Twitter Anne Hidalgo, en un mensaje de un tono sobrio similar al de otros responsables políticos.

La alcaldesa, igual que otros, recordó también el lema de París: "Fluctuat nec mergitur" ("Golpeada por la corriente pero no se hunde") para subrayar el carácter irreductible de la ciudad y sus habitantes ante la adversidad.

Este fue el primer aniversario tras la sentencia del juicio por los atentados, que concluyó con la condena a cadena perpetua sin posibilidad de liberación para Salah Abdeslam, el único superviviente de los comandos que cometieron los atentados (el otro, Abdelhamid Abaaoud, murió cinco días después del los ataques en una operación policial en Saint-Denis).

Otros acusados fueron condenados a prisión de por vida, aunque con la posibilidad de liberación anticipada al cabo de largos períodos de tiempo.

El aniversario también se recordó en el estado del Parque de los Príncipes, en el encuentro de liga entre el París Saint-Germain y el Auxerre, donde se guardó un minuto de silencio en homenaje a las víctimas de los atentados.

Los jugadores del equipo local llevaron en sus camisetas una flor de arándano, símbolo francés de homenaje a los caídos por Francia, que en esta ocasión también fue en recuerdo de las víctimas de lso atentados.

Pero no todos fueron homenajes emocionados. El secretario general del Partido Socialista, Olivier Faure, recordó hoy que un miembro de la seguridad del Bataclan, Hermann Aka Bile, que salvó a decenas de personas al hacerlas salir por una salida de emergencia, sigue viendo como el Estado rechaza concederle la nacionalidad francesa.

"Señor presidente, repare esta injusticia", urgió Faure a Emmanuel Macron en un mensaje de Twitter.