El presidente estadounidense, Joe Biden, ha dado un paso al frente en la protección del derecho al aborto tras la decisión tomada a finales de junio por el Tribunal Supremo, que anuló el fallo Roe contra Wade que reconocía por primera vez el derecho de las mujeres al aborto sin restricciones durante el primer trimestre del embarazo, un precedente legal que se lleva usando en el país desde 1973.

Biden, que se ha visto bajo presión por este asunto y ha declarado en varias ocasiones que la decisión del tribunal debería revertirse, tiene previsto firmar este viernes una orden ejecutiva que permitirá proteger el aborto y otros derechos fundamentales como la "privacidad, autonomía, libertad y igualdad", según ha indicado en un comunicado la Casa Blanca.

La orden insta al Departamento de Salud a tomar medidas para garantizar el acceso a la medicación abortiva y busca aumentar la protección de los sanitarios que realizan estas prácticas en el marco de la Ley de Trabajo y Tratamiento Médico de Emergencia. Además, señala que el Departamento de Salud tendrá que emitir un informe en 30 días sobre la implementación de estas nuevas medidas.

Para el presidente, la decisión del tribunal "eliminó un derecho con el que la población estadounidense contaba desde hacía casi 50 años, del de decidir la propia salud reproductiva de cada mujer al margen de la interferencia del Gobierno". "Se han negado derechos fundamentales a millones de mujeres de todo el país, con las graves consecuencias que esto implica para su libertad, su vida y su bienestar", recoge el texto.

Imagen de varias activistas en favor de el aborto en EEUU. JIM BOURG

Así, la Casa Blanca ha puntualizado que esta decisión afectará especialmente a "las mujeres de color, con bajos recursos y que residan en zonas rurales" y ha indicado que el objetivo de esta orden ejecutiva es proteger también la privacidad de aquellas mujeres que utilizan aplicaciones de seguimiento para la menstruación.

No obstante, ha aseverado que ninguna de estas medidas lograrán restaurar por completo el derecho al aborto de miles de personas que "lo han perdido" y ha incidido en que la "única forma de salvaguardar el derecho de una mujer a decidir es a través de la restauración de los preceptos de Roe contra Wade por parte del Congreso".

La decisión ha sido tomada dos semanas después de que el Supremo anulara Roe contra Wade con el voto a favor de los seis jueces conservadores y el rechazo de los tres magistrados liberales del alto tribunal.

Al eliminar el carácter de derecho constitucional, el fallo del Supremo da vía libre a los estados para ejecutar su prohibición, en medio de una disputa sobre una ley de 2018 aprobada por la legislatura republicana de Mississippi para prohibir los abortos después de las 15 semanas.