Un grupo de 28 estudiantes fueron liberados por sus secuestradores anoche en el noroeste de Nigeria, después del rapto el pasado 5 de julio de un total de 121 en un colegio cristiano, confirmaron hoy a Efe fuentes del centro educativo.

"Han sido liberados, 28 de ellos fueron liberados la noche del sábado. Están con nosotros y pronto se reunirán con sus familias", aseguró a Efe vía telefónica John Joseph Hayab, miembro de la Iglesia Bautista y presidente de la rama regional de la Asociación Cristiana de Nigeria, sin especificar si se pagó un rescate por su liberación.

Los atacantes, que las autoridades sospechan que fueron bandidos, irrumpieron en el Colegio Bautista Bethel, en el estado de Kaduna, hacia las 02.00 hora local (01.00 GMT) del pasado 5 de julio, disparando de manera esporádica antes de llevarse a los alumnos,

Según aseguró a Efe el director del colegio, el número total de secuestrados fue 121 pero uno de ellos fue encontrado una semana después, junto a otros dos adolescentes, en un bosque situado en la localidad de Chikun, donde se encuentra el centro.

Asimismo, otros dos estudiantes fueron encontrados el pasado 14 de julio después de huir de sus captores, cuando les pidieron que fueran a buscar leña sin acompañarlos.

Con la reciente liberación de 28 alumnos, esto dejaría el número total de estudiantes que permanecen en cautiverio en 90 pero las cifras no están claras ya que, según Hayab, son 81 los que siguen secuestrados.

Tras el secuestro, el Gobierno regional ordenó el cierre de trece colegios considerados "vulnerables" a los asaltos de bandidos.

Una oleada creciente de secuestros

En los últimos meses se han incrementado los secuestros masivos en escuelas del norte de Nigeria con el fin, en muchos casos, de obtener lucrativos rescates.

Al menos 950 alumnos fueron raptados desde diciembre, según la Agencia de la ONU para la Infancia, Unicef.

El pasado 4 de julio al menos ocho personas fueron secuestradas tras la irrupción de hombres armados sospechosos también de ser bandidos en la sede del Centro Nacional de Tuberculosis y Lepra en la localidad de Zaria, situada también en Kaduna.

El 30 de mayo, 147 estudiantes fueron secuestrados en una escuela coránica del estado de Níger (centro-norte), de los que once fueron liberados un día después, mientras el 29 de mayo otros 14 alumnos de la Universidad de Greenfield, en Kaduna, fueron liberados, tras llevar secuestrados desde abril.

El 2 de marzo 279 estudiantes que habían sido raptadas el 26 de febrero en una escuela pública femenina del estado de Zamfara fueron liberadas.

Ese secuestro de Zamfara, que las autoridades atribuyeron a "bandidos" activos en el noroeste del país, tuvo lugar dos semanas después del rapto por hombres armados de 38 estudiantes y profesores de la Escuela de Ciencias del Gobierno en Kagara (estado de Níger), que fueron finalmente liberados.

El pasado 11 de diciembre 344 alumnos fueron capturados en una escuela en el estado norteño de Katsina, en un ataque reivindicado por el grupo yihadista Boko Haram -que hasta entonces se limitaba a atacar en el noreste del país-, aunque las autoridades culparon a bandidos.

Estos alumnos fueron localizados y liberados una semana más tarde en un bosque del estado vecino de Zamfara.

El pasado 12 de junio, el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, prometió poner fin a esos sucesos y expresó su "pésame" a las familias de las víctimas de la violencia cometida por bandidos en el noroeste y centro del país.