Chow Hang-tung, vicepresidenta de la Alianza de Hong Kong en Apoyo a los Movimientos Patrióticos y Democráticos de China -organización que convoca la vigilia anual en Hong Kong en recuerdo a las víctimas de la matanza de Tiananmen del 4 de junio de 1989- fue detenida hoy, informa la prensa local. Según fuentes citadas por la televisión pública RTHK, Chow fue detenida en la mañana de este viernes cerca de su oficina.

La abogada había dicho que "encendería una vela donde todo el mundo pueda verla" para conmemorar hoy el 32 aniversario de Tiananmen, cuya vigilia en Hong Kong fue prohibida por la Policía por segundo año consecutivo alegando razones de prevención de contagios del coronavirus. Las medidas anti-covid activas en Hong Kong contemplan actualmente la prohibición de reuniones públicas de más de cuatro personas a pesar, apunta RTHK, de que en la antigua colonia británica no se ha registrado ningún caso de transmisión local de origen desconocido en más de un mes. Por el momento, la organización a la que pertenece Chow, conocida popularmente como Alianza de Hong Kong (HKA), todavía trata de confirmar las informaciones que apuntan a su detención.

El diario privado South China Morning Post apunta, citando en este caso a fuentes policiales, que Chow fue arrestada bajo sospechas de promover una manifestación prohibida en virtud de lo estipulado en la normativa local de Orden Público. La HKA intentó que se retirase la prohibición policial para poder celebrar de nuevo la vigilia y, al no recibir el apoyo de la junta de apelación, pidió a sus simpatizantes que no se reunieran este viernes en el céntrico parque Victoria, donde tiene lugar cada año.

El año pasado, pese a la prohibición policial, miles de personas se congregaron en ese parque para conmemorar a los fallecidos tras la represión militar de las protestas prodemocráticas llevadas a cabo en la pequinesa plaza de Tiananmen hace ya 32 años. En vista de la prohibición, la Alianza también desconvocó un homenaje en línea por miedo a incumplir la ley de seguridad nacional impuesta hace un año por Pekín, agrega South China Morning Post.