Los forenses de la Fiscalía General de la República (FGR) de El Salvador localizaron los restos sepultados de al menos 10 personas en la casa de un expolicía procesado por un doble feminicidio, informó este viernes la institución.

Las autoridades de seguridad registraron a inicios de mayo el asesinato de 2 hombres y 2 mujeres en una localidad del occidental departamento de Santa Ana, y por este crimen fue detenido el expolicía Hugo Ernesto Osorio Chávez, acusado hasta el momento únicamente por el doble feminicidio.

El Ministerio Público indicó que "se ha podido rescatar los restos de 10 personas, algunos con evidencia de haber sido asesinados hace dos años" en la vivienda del detenido. Añadió que con esta investigación se podrán esclarecer "casos de personas que habían sido reportadas como desaparecidas" en el municipio de Chalchuapa. Señaló que los forenses también han ubicado en la vivienda y en un terreno colindante "siete fosas más donde se presume este asesino enterró a otras víctimas".

La institución también ordenó la detención de 9 "imputados involucrados en 13 asesinatos como autores, instigadores y cómplices" del expolicía, sin precisar si se trata de un grupo de personas detenidas anteriormente bajo sospechas de haber colaborador con el exmiembro de la Policía.

Según reportes de la prensa local, las autoridades salvadoreñas indican que Osorio actuaba por "desviaciones sexuales" y también cometía homicidios por "encargo".

La Fiscalía recibió entre los años 2014 y 2019 más de 22.000 denuncias de personas desaparecidas, con un promedio diario de diez casos, de acuerdo con un estudio dado a conocer a inicios de abril de este año.

El documento "Desaparición de Personas en El Salvador", de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), da cuenta de que en ese lapso la Policía Nacional Civil (PNC) recibió 12.495 denuncias, pero el dato de la FGR fue de 22.307.

Israel Ticas, uno de los forenses más reconocidos en el país y que trabaja para la Fiscalía, ha señalado en diferentes ocasiones que si una persona pasa más de ocho días desaparecida existe una alta probabilidad de que haya sido asesinada y enterrada en un cementerio clandestino.