La ultraderechista francesa Marine Le Pen confirmó este jueves que abandonará la presidencia de su partido, la Agrupación Nacional (RN), para representar con su candidatura al Elíseo a "todos los que quieren librar el combate nacional".

"Es necesario que yo no sea solo la candidata del RN", dijo en una entrevista en el mensual L'Incorrect, próximo a su sobrina Marion Maréchal.

La política francesa, de 52 años, tomó el relevo en la presidencia de la formación a su padre, Jean-Marie Le Pen, en enero de 2011, por lo que ya llevaba una década al frente del entonces Frente Nacional, que pasó a llamarse en 2018 Agrupación Nacional.

Le Pen señaló que en el congreso previsto en julio en Perpiñán, en el sur del país, seguirá todavía a las riendas porque en ese encuentro está previsto que se legitime la candidatura a las presidenciales de 2022 y todavía debe ser designada.

Por tanto, la líder ultraderechista dejaría la presidencia después. "En las actuales circunstancias y con una posibilidad de victoria que nunca ha sido tan importante como ahora, debo ser la candidata de todos aquellos que quieren librar el combate nacional", destacó.

Le Pen indicó en esa entrevista que la fecha de su salida y el nombre de la persona que le sucederá se decidirá en Perpiñán.

Algunos de sus ejes políticos en caso de llegar al Elíseo ya están claros: "Pararía la inmigración o, para ser precisa, la reduciría a su mínimo viable y justo. Y me aseguraría de que quienes lleguen a Francia a trabajar y no consigan trabajo vuelvan a sus países".