Italia ha registrado este martes un nuevo aumento en el número de fallecidos y en el de nuevos fallecidos contagios tras los buenos datos del lunes, que situaron las defunciones por debajo del centenar por primera vez desde el 9 de marzo, si bien siguen disminuyendo los pacientes hospitalizados, que caen por debajo de los 10.000.

Según ha informado Protección Civil, en las últimas 24 horas han fallecido otras 162 personas, un dato que contrasta con los 99 de la víspera, lo que sitúa el total en 32.169. Además, se han registrado 813 nuevos contagios --frente a los 451 del lunes--, lo que eleva el balance de la pandemia en Italia a 226.699 casos.

El número de casos positivos cae en 1.424 personas hasta situarse en 65.129. De ellos, los hospitalizados son actualmente 9.991, 216 menos que el lunes. Esta es la primera vez desde el 15 marzo que se baja por debajo de los 10.000 hospitalizados. En la UCI hay 716 personas, 33 menos que la víspera.

En lo que se refiere a los pacientes que han superado la enfermedad COVID-19 provocada por el nuevo coronavirus originado en Wuhan, son ya 129.401, después de que otros 2.075 hayan recibido el alta en el último día.

La subida tanto en el número de decesos como de contagios ha venido motivada por los datos de Lombardía, la región más castigada por la pandemia. Aquí, según los datos ofrecidos por el gobierno regional, ha habido 462 casos -ya hay 85.481 contagios confirmados- y 54 fallecidos para un total de 15.597.

Entretanto, la actividad económica se va recuperando en el país después de que este lunes se levantaran otras de las restricciones impuestas por el Gobierno para frenar la pandemia. Según ha informado este martes Confcommercio, la patronal del sector, el 90 por ciento de las tiendas de ropa ha reabierto sus puertas mientras que en el sector de la restauración el dato se sitúa en el 70 por ciento.

En este último caso, según los datos recogidos por la cadena RAI, bares y restaurantes han retomado su actividad con un 40 por ciento de su personal en casa, lo que representa unos 400.000 puestos de trabajo.

Reino Unido

Por su parte, el Reino Unido comunicó este martes 545 nuevas muertes por COVID-19, hasta un total de 35.341 fallecidos en residencias, hospitales y domicilios desde que comenzó la pandemia.

Tras haber registrado el domingo y el lunes las cifras de fallecidos diarios más bajas desde marzo (170 y 160 muertos, respectivamente), el recuento oficial ha vuelto a repuntar este martes, cuando se han detectado además 2.412 nuevos contagios.

En la rueda de prensa diaria para informar sobre las medidas del Gobierno contra el coronavirus, el ministro de Medioambiente, George Eustice, informó de que este lunes se realizaron en el país 89.784 test.

En total, durante la crisis sanitaria se han producido cerca 55.000 muertes por encima de la media en el país, de las cuales en torno al 25 % no parecen relacionadas directamente con el coronavirus, sostuvo el jefe de análisis sanitario de la Organización Nacional de Estadística (ONS, en inglés), Nick Stripe.

Los datos de las agencias estadísticas británicas publicados este martes sugieren además que más de 11.600 personas han muerto en residencias de la tercera edad en esta crisis sanitaria, lo que ha encendido las críticas contra la gestión del Gobierno del primer ministro, el conservador Boris Johnson.

La oposición laborista acusó en el Parlamento al Ejecutivo de haber actuado con lentitud para tomar medidas en esos centros y de haber dado prioridad a los planes para evitar que se saturaran los hospitales.

El ministro de Salud, Matt Hancock, argumentó por su parte que el porcentaje de fallecidos en residencias es superior en otros países europeos y aseguró que su Gobierno está resuelto a hacer todo lo "humanamente posible" para proteger las residencias.

Francia

En Francia, los datos oficiales indican que el número total de fallecidos por el coronavirus en el país es de 28.022, 217 menos que los indicados la víspera.

El número de muertos en los hospitales en las últimas 24 horas aumentó en 125 personas, hasta las 17.714, mientras que en las residencias bajó, a causa del ajuste de la contabilidad, en 342, hasta situarse en las 10.308.

El pasado domingo, las cifras oficiales registraron un importante salto de la cifra de fallecidos, al integrar datos de residencias de la tercera edad.

Desde el inicio de la crisis sanitaria en Francia, 143.427 personas se han contagiado en el país, 524 de ellas en las últimas 24 horas.

Salomon indicó que el número de personas hospitalizadas se redujo en 547, hasta las 18.468, una tendencia que se observa también entre los que precisan cuidados intensivos, 1.894, 104 menos que la víspera.

El director general de Sanidad insistió en la necesidad de que los franceses acudan a su médico "al menor síntoma" de la enfermedad, para que puedan ser sometidos a test y, en caso de dar positivo, sean aislados, al igual que las personas con las que entraron en contacto.

Superada la primera semana de desescalada tras dos meses de confinamiento, Salomon aseguró que eso no significa "el fin de la epidemia", y advirtió de que en las condiciones actuales "el riesgo de contacto con el virus aumenta".

"El virus sigue ahí, es peligroso y mortal. La evolución de la epidemia depende de todos nosotros", aseguró Salomon, que apeló a mantener la distancia y a respetar las reglas de higiene de manos.