El partido oficialista Nuevo Azerbaiyán, liderado por el presidente Ilham Alíev, en el poder desde 2003, logró este domingo en las elecciones parlamentarias anticipadas la mayoría de escaños en la Asamblea Nacional, tal y como estaba previsto, según la Comisión Electoral Central (CEC).

Con el 88% de los votos escrutados, Nuevo Azerbaiyán consigue 65 escaños de un total de 125, en una jornada en la que la participación fue del 47,81%, según dijo este lunes el presidente de la CEC, Mazajira Panájova.

Otros 40 escaños irán a parar a candidatos independientes.

El escrutinio ha ido avanzando muy lento, pero anoche el partido oficialista celebraba ya la victoria, que se daba por hecho.

"Las elecciones extraordinarias han acabado. Los resultados de los sondeos a pie de urna muestran que nuestro partido ha ganado", escribió el vice primer ministro y secretario ejecutivo de Nuevo Azerbaiyán, Ali Ajmadov, en su página de la red social Facebook.

"Estamos agradecidos a nuestro partido y a sus candidatos y a todos los que votaron por la política del presidente", añadió.

Las elecciones parlamentarias estaban previstas para el próximo noviembre, pero Alíev convocó el 5 de diciembre comicios anticipados después de que la Asamblea Nacional, a iniciativa del partido oficialista, decidiera autodisolverse para "respaldar las reformas" del presidente, de 58 años.

Éste sustituyó en octubre al primer ministro por un experto en Economía al criticar el ritmo de las reformas económicas en el país.

Asimismo, reemplazó al ministro de Economía y despidió al jefe de la Administración Presidencial, Ramiz Mehdiyev, que tenía 81 años y estaba en el cargo desde 1995, nombrado por el padre de Alíev.

El presidente azerbaiyano espera mejorar la imagen del Gobierno con las elecciones y sustituir a la vieja guardia por diputados más jóvenes.

Las autoridades han asegurado que las elecciones, en las que 5,3 millones de azerbaiyanos con derecho a voto podían elegir entre 1.314 candidatos, serían libres y transparentes, pero parte de la oposición, agrupada en el Consejo Nacional de Fuerzas Democráticas (CNFD) las ha boicoteado por considerar que en el país no existen las condiciones mínimas para unas elecciones justas.

Según dijo este domingo a Efe Arif Hajili, jefe del partido opositor Musavat, las elecciones parlamentarias de hoy estaban acompañadas de un fraude total.

"Casi en todas partes: en Bakú y en las regiones hubo votos de las mismas personas en diferentes mesas electorales, votos multiplicados, presión sobre los observadores, intentos de cambiar las urnas, urnas no transparentes en algunos lugares", entre otras irregularidades que asegura haber detectado durante la jornada.

Según dijo Hajili, una pruebas del supuesto fraude es la "exageración artificial de la participación", que fue del 44,84 % a las 13.00 GMT, de acuerdo con la CEC, "cuando en realidad no fue ni siquiera del 20% durante todo el día".

En total 883 observadores de 59 organizaciones internacionales, entre ellas la Oficina para Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR, en inglés) de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que presentará este lunes sus conclusiones preliminares.