El hombre y la mujer detenidos el viernes por la noche en el marco de la investigación sobre los vuelos de drones que perturbaron gravemente el tráfico aéreo del aeropuerto londinense de Gatwick, fueron liberados sin cargos, anunció el domingo la policía.

"Estas dos personas cooperaron plenamente en nuestra investigación y estoy convencido de que ya no son sospechosos en los incidentes de los drones en Gatwick", declaró un responsable de la policía, Jason Tingley, en un comunicado.

Agregó que "prosigue la investigación para localizar a los responsables de incursiones de drones"

La pareja -él de 47 años, ella, de 54- había sido detenida en conexión con el "uso delictivo de drones".

La única pista de Gatwick fue cerrada por primera vez el miércoles a las 21H00 (locales y GMT) después de que se avistasen dos drones sobrevolando el lugar. Por la noche volvió a abrir durante menos de una hora, y cerró de nuevo de madrugada, cuando se volvió a señalar la presencia de drones, que fueron avistados 50 veces en 24 horas.

Durante tres días, 140.000 pasajeros se vieron afectados por las perturbaciones y cierres causados en Gatwick.

El director general del aeropuerto, Stewart Wingate, denunció una "actividad muy dirigida con el objetivo de cerrar el aeropuerto y causar el mayor número de perturbaciones justo antes de Navidad".

Con los aviones paralizados, los viajeros tuvieron que armarse de paciencia, durmiendo incluso en el suelo del aeropuerto. Los aviones fueron desviados a otras ciudades de Reino Unido o incluso a París y Amsterdam.

La policía aseguró que se trata de "un acto deliberado" pero precisó que "no hay absolutamente ninguna evidencia que sugiera un vínculo terrorista".

La legislación británica estipula que no se pueden utilizar drones a menos de un kilómetro de un aeropuerto y que estos no deben superar una altitud de 122 metros. El responsable o responsables de estos actos se exponen a una pena de hasta cinco años de prisión y a fuertes multas.