Al menos 27 soldados han muerto y otros 79 han resultado heridos este viernes en un atentado suicida contra una mezquita dentro de una base militar en la provincia afgana de Jost, en el este del país, según el último balance ofrecido por las autoridades y recogido por la agencia afgana Jaama.

El ataque ha tenido lugar en una mezquita en el interior de una base militar en el distrito de Ismail Jel, en Jost, durante la oración del viernes.

El portavoz del Ministerio de Defensa, Javid Ghafoor, ha indicado que se ha enviado al lugar del atentado un equipo de investigación y cuatro helicópteros para poder trasladar a Kabul a los soldados heridos.

Por el momento ningún grupo ha reivindicado la autoría del atentado. Tanto los talibán como Estado Islámico han perpetrado en los últimos meses ataques que han dejado un número considerable de víctimas.

El presidente afgano, Ashraf Ghani, ha condenado el "cobarde ataque" y ha ordenado una investigación inmediata sobre lo ocurrido, además de expresar sus condolencias a los familiares de las víctimas. Además, ha dado instrucciones para que se priorice la atención a los heridos.

Esta misma semana, un atentado suicida contra una reunión de académicos religiosos que celebraban el nacimiento del profeta Mahoma en un salón de bodas de Kabul causó más de medio centenar de muertos y decenas de heridos.

Ambos ataques se producen en la misma semana en la que los talibanes confirmaron su participación en una reunión en Catar con representantes de Estados Unidos para tratar de negociar un acuerdo de paz para poner fin a 17 años de conflicto.

La última reunión en Catar se produjo la semana pasada tras la segunda ronda de consultas sobre el conflicto afgano en Moscú, en la que estuvieron presentes representantes de los talibanes y del Alto Consejo para la Paz de Afganistán, si bien no estuvo el Ejecutivo de Kabul.

Afganistán atraviesa una de sus etapas más sangrientas desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015.