Michael Cohen, exabogado del presidente estadounidense, Donald Trump, se ha entregado este martes al FBI tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía, que le investiga por fraude fiscal y bancario y violación de la ley electoral, y ha afirmado que el mandatario "le ordenó cometer un delito".

"Hoy se ha puesto de pie y ha declarado bajo juramento que Donald Trump le ordenó cometer un delito pagando a dos mujeres para influir en las elecciones. Si esos pagos fueran un delito para Michael Cohen, ¿por qué no serían un crimen para Donald Trump?", ha señalado el abogado de Cohen, Lanny Davis, a través de su cuenta en la red social Twitter.

Cohen se ha entregado al FBI horas antes de que tuviera que comparecer ante un tribunal de Manhattan, en medio de fuertes rumores de los que se ha hecho eco la prensa estadounidense acerca de un posible pacto entre las partes.

Una vez en la sede jurisdiccional, se ha declarado culpable de ocho cargos: cinco de evasión fiscal, uno de fraude bancario, uno por contribuciones empresariales ilegales y otro por contribuciones excesivas a la campaña electoral.

Además, ha declarado que "en coordinación y bajo la dirección de un candidato a la oficina federal" ocultó información que habría sido perjudicial tanto para el candidato como para su campaña, en una aparente alusión a Trump.

Davis ha asegurado que su cliente ha decidido declararse culpable porque está preparado para "poner por delante a su familia y país y contar la verdad sobre Donald Trump".

La actuación de Cohen obedece a un acuerdo alcanzado por la Fiscalía, según el cual su marco penal ha quedado reducido a entre tres y seis años, tal y como recoge la cadena estadounidense CNN.

Esta confesión es un duro revés para Trump. Cohen ha formado parte de su círculo de confianza durante la última década, primero como su abogado personal y después como asesor en la campaña electoral y en el Gobierno.

Sin embargo, la relación entre ambos se enfrió el pasado mes de abril, cuando agentes del FBI registraron la vivienda y varios locales de Cohen.

Cohen está siendo investigado por fraude fiscal y bancario y violaciones de la ley electoral vinculadas a un pago secreto a la ex actriz porno 'Stormy Daniels', que asegura que mantuvo una relación sexual con Trump en 2006, a cambio de su silencio.

Según Lawrence M. Noble, ex consejero general de la Comisión Federal Elecotral, las declaraciones de Cohen hacen que sea la primera vez en casi 50 años que un presidente estadounidense ha sido acusado de ser parte de un delito de financiación de campaña.

"Esta es la primera vez desde Watergate que se ha acusado a un presidente de estar involucrado personalmente, dirigiendo y coordinando, una violación de la financiación de campaña", ha afirmado Noble, según ha recogido la cadena estadounidense CNN.