El líder del Partido Democrático (PD), Matteo Renzi, ha anunciado este lunes su dimisión al frente de la formación tras la "derrota clara" sufrida en las elecciones generales de este domingo en Italia y ha adelantado que su formación no sellará ninguna alianza y pasará a la oposición.

En una esperada comparecencia, ha reconocido que se trata de "una derrota clara" y ha defendido "abrir una nueva página en el partido", cuyo liderazgo ha anunciado que abandonará una vez constituido el Parlamento y formado el nuevo Gobierno.

Según ha precisado, ya ha pedido la convocatoria de una asamblea nacional del partido para preparar un congreso en el que se elija al nuevo líder, para lo que ha defendido la necesidad de primarias. En cuanto a su futuro, ha dicho que se limitará a ser senador raso, celebrando su elección como tal por Florencia este domingo.

El antiguo primer ministro ha subrayado que quien ha ganado las eleciones no tiene los apoyos suficientes para gobernar y ha dejado claro que mantienen su promesa electoral de "no a un gobierno con los extremistas ni de los extremistas". "Cuando hemos dicho no a la cultura del odio no estábamos bromeando", ha insistido.

Así, ha recalcado que del Movimiento 5 Estrellas y de la Liga le separan sobre todo su "antieuropeísmo" y ha recordado las numerosas acusaciones que desde estas formaciones se han vertido contra el Partido Democrático, tachándoles de "corruptos" o "mafiosos" entre otros. "Haced gobierno sin nosotros", les ha espetado.

"Si somos así nuestro puesto en esta legislatura está en la oposición", ha recalcado, insistiendo en que el PD no dará su apoyo a un "gobierno antisistema". En un momento en el que se apela a la responsabilidad, ha añadido, "seremos responsables" y por ello "estaremos en la oposición".

El PD, actualmente al frente del Gobierno, ha sufrido un fuerte varapalo en las elecciones generales de este domingo en Italia, quedando por debajo del 19 por ciento de los votos, si bien es la segunda fuerza política a nivel nacional.

Renzi, que fue primer ministro entre febrero de 2014 y diciembre de 2016, confiaba en regresar al Palazzo Chigi, que abandonó tras ligar su futuro político al resultado del referéndum sobre la reforma constitucional que perdió.

El resultado es un duro revés para el PD, que en las elecciones europeas de 2014, con Renzi ya al frente, logró el 40 por ciento de los votos y que ganó las elecciones generales de 2013 con el 30,32 por ciento.