Hasta seis terroristas suicidas han desencadenado este sábado un ataque masivo contra las sedes de la Inteligencia siria en Homs, en una cadena de atentados que ha costado las vidas de 42 personas, entre ellas las del jefe de la sección local de Inteligencia, el coronel Hasán Dabul, y el jefe de la división en Homs de las Fuerzas de Seguridad del Estado, el coronel Darwish, según medios oficiales.

Los atacantes tuvieron como objetivo una sede de la Inteligencia militar en el barrio de Al Mahatta, en el centro de la ciudad, donde se desencadenaron enfrentamientos y hasta tres terroristas suicidas hicieron estallar la carga explosiva que llevaban adosada al cuerpo en medio de los uniformados.

En los choques y explosiones en ese cuartel, al menos 30 personas murieron, mientras que otros 12 efectivos de la Policía perecieron en un segundo ataque contra una sede de los servicios secretos y de seguridad.

En el segundo ataque, resultó herido el jefe de la Inteligencia civil, entre otros agentes.

Por el momento, se desconoce si los asaltantes pertenecen al grupo yihadista Estado Islámico (EI) o a otras facciones armadas radicales que operan en territorio sirio, según el Observatorio.

Desde primera hora de la mañana se escucharon disparos y explosiones en la ciudad de Homs, ubicada al norte de la capital, Damasco, y una de las más castigadas por la guerra.

Actualmente, la urbe está completamente en manos de las fuerzas gubernamentales, menos el barrio de Al Waer, que se encuentra rodeado por el ejército.

Por su parte, el EI controla desde el pasado diciembre distintas áreas del este de la provincia de Homs, de la que la ciudad homónima es capital, y las fuerzas de Damasco luchan contra los yihadistas en esta región.