El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, anunció que propondrá el próximo otoño crear un sistema de información europeo para identificar a las personas que tengan previsto viajar a la Unión Europea (UE), una medida en el marco de la lucha antiterrorista.

Juncker hizo el anuncio durante su discurso sobre el estado de la Unión, en el que subrayó la necesidad de reforzar la cooperación entre los Estados miembros en materia de seguridad.

"Cada vez que alguien entre o salga de la UE, habrá un registro de cuándo, dónde y por qué", dijo el presidente del Ejecutivo comunitario, que indicó que Bruselas plantea proponer en noviembre un sistema automático de información sobre viajes.

Ese instrumento, indicó, ayudará a determinar "quién tendrá permitido viajar a Europa" y a disponer de datos de las personas que tienen previsto desplazarse a la UE antes de que accedan al territorio comunitario.

Juncker subrayó que la UE "necesita" esa información, y recordó que en los últimos meses ha habido varios casos (en el marco de distintos atentados) que han revelado que los servicios de inteligencia de un país disponían de información sobre los supuestos autores que nunca fue trasladada a las autoridades de otro Estado miembro, donde podrían haberse tomado medidas.

Por otra parte, indicó que la seguridad de las fronteras también supone que se debe dar prioridad al intercambio de información sobre inteligencia y que con ese objetivo, la CE quiere reforzar Europol, la Oficina Europea de Policía, para darle mejor acceso a las bases de datos y más recursos.

Juncker señaló que una unidad antiterrorista que en la actualidad cuenta con 60 funcionarios no puede estar operativa a tiempo completo de manera ininterrumpida.

En el contexto de la lucha contra el terrorismo, recordó los avances en los últimos años en particular para dificultar los viajes a los combatientes extranjeros, controlar el uso de las armas de fuego, combatir la financiación del terrorismo y terminar con la propaganda terrorista en internet.

"Pero necesitamos hacer más. Necesitamos saber quién cruza nuestras fronteras", insistió Juncker, quien señaló que también en ese contexto se sitúa la nueva guardia costera europea de fronteras y costas.

Recordó asimismo que la Agencia Europea de Control de las Fronteras Exteriores (Frontex) cuenta ya con 600 agentes en las fronteras entre Grecia y Turquía y alrededor de un centenar en Bulgaria.

En ese contexto, expresó su deseo de contar con "al menos 200 guardias de fronteras adicionales y otros 50 vehículos desplegados en las fronteras exteriores de Bulgaria en octubre".

Por otra parte, Juncker habló de la gestión de la inmigración y en ese contexto mencionó el lanzamiento de un "ambicioso plan de inversión para África y los países vecinos", con el potencial de movilizar 44.000 millones en inversiones, que podría aumentar a 88.000 millones si los Estados miembros lo apoyan también económicamente.

"Esto complementará nuestra ayuda al desarrollo y ayudará a resolver una de las causas de raíz de la inmigración", indicó.