El presidente de Lufthansa, Carsten Spohr, no participa en el homenaje a las víctimas del accidente del avión de Germanwings, por la disputa sobre las indemnizaciones y la crítica a su gestión.

La localidad francesa de Le Vernet, el punto habitado más cercano al lugar donde colisionó, el pasado 24 de marzo, el Airbus A320 de Germanwings con 150 ocupantes, homenajea hoy a las víctimas de esa tragedia en una ceremonia en la que también se procede a inhumar los restos humanos que no fueron identificados.

El copiloto del avión de Germanwings estrelló de forma intencionada contra los Alpes franceses el avión, según los investigadores.

"Ha decidido no estar en el lugar de los hechos debido a la tensa atmósfera", dijo un portavoz de Lufthansa, casa matriz de Germanwings.

El acto comenzó a las 14.45 horas (12.45 GMT) y tiene carácter interreligioso por respeto a todas las religiones y nacionalidades de quienes iban en ese aparato, en su mayoría alemanes y españoles.

Los familiares de las víctimas mortales de la localidad alemana de Haltern (Renania del Norte Westfalia) han causado polémica en Alemania con una carta en la que criticaron a Spohr.

En el homenaje sí participaron el presidente de Germanwings, filial de bajo coste de Lufthansa, Thomas Winkelmann, y la directora de Finanzas de Lufthansa, Simone Menne.