España y los representantes de los países centroamericanos consideran que las elecciones en Honduras no se pueden reconocer, pero tampoco ignorar, y apuestan por un gran acuerdo nacional entre los hondureños, que debe ir precedido por el consenso de los países latinoamericanos.

Fuentes diplomáticas informaron a Efe de que ese ha sido el consenso surgido en el desayuno de trabajo que el Rey Juan Carlos y el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, han mantenido hoy con los dirigentes de Centroamérica y de la República Dominicana, en el marco de la XIX Cumbre Iberoamericana.

Honduras estuvo representada por la canciller del Gobierno del derrocado presidente Manuel Zelaya, Patricia Rodas, quien proclamó la ilegitimidad de las elecciones que dieron la victoria al líder del Partido Nacional, Porfirio Lobo.

Según lo expuesto en el encuentro, las elecciones hondureñas constituyen "un hecho político importante" y sus resultados pueden permitir a Lobo avanzar hacia el gran acuerdo nacional que necesita Honduras para recuperar la normalidad democrática, un consenso que deberá ir precedido de otro gran acuerdo entre todos los latinoamericanos.

Según las fuentes, la delegación española está aportando ideas en el marco de la Cumbre de Estoril para lograr que los jefes de Estado y de Gobierno de la comunidad iberoamericana aprueben una declaración de consenso sobre Honduras a favor de la recuperación de la institucionalidad democrática.

Rodríguez Zapatero, que tomó la palabra sobre este asunto después de que interviniera Patricia Rodas, no se pronunció sobre la legitimidad de los comicios y precisó que el problema no está tanto en este punto como en lograr la estabilización democrática del país mediante un "gran acuerdo nacional", que debe ser favorecido por un consenso centroamericano, latinoamericano y europeo.

Fuentes del Gobierno español subrayaron que el escenario es hoy diferente al de ayer y la situación de ruptura de la institucionalidad democrática en Honduras tiene ahora otros protagonistas, por lo que, tras los comicios, "unos y otros" deben trabajar para recuperarla.

En este sentido, Rodríguez Zapatero destacó la gran importancia que cobra la reunión que tendrá lugar el próximo miércoles 2 de diciembre en el Parlamento de Honduras, en la que se tiene que decidir sobre si se restituye o no la normalidad democrática previa al golpe de estado.

Junto al Rey Juan Carlos y Rodríguez Zapatero, participaron en el encuentro los presidentes de El salvador, Mauricio Funes; Costa Rica, Óscar Arias y de la República Dominicana, Leonel Fernández.

También asistieron la representante de Manuel Zelaya, Patricia Rodas, y los ministros de Asuntos Exteriores de Panamá, Juan Carlos Varela, de Nicaragua, Samuel Santos, y de Guatemala, Haroldo Rodas.