El incidente más violento tuvo lugar en Iskandariya, al sur de Bagdad, cuando hombres armados abatieron a tiros a un supervisor vecinal y a su hijo, iniciando un enfrentamiento con la Policía en el que perdieron la vida cuatro de los asaltantes.

En Tikrit, una bomba de carretera se cobró la vida de un teniente de Policía mientras patrullaba por el centro de la ciudad. Otros tres policías resultaron heridos en la explosión.

Cuatro personas murieron tras la explosión de una bomba de carretera cerca del coche en el que viajaban, cerca de la ciudad de Haditha, mientras que un joven perdía la vida al coger con sus manos una bomba colocada en un camino de la ciudad de Mussayab.

Finalmente, un coche bomba se cobró la vida de dos personas e hirió a otras cinco tras hacer explosión en la ciudad de Mosul, al norte de Bagdad.