Tras el atentado, que tuvo lugar en el sur de la ciudad, los militares fueron atacados con armas de fuego por un grupo de hombres, indica un comunicado del Ejército estadounidense.

El atentado se produce una día después de que el mando norteamericano anunciase que uno de sus uniformados perdiese la vida ayer por la detonación de una bomba al paso del vehículo en que se trasladaba, en el noreste de Bagdad.

Asimismo, un soldado norteamericano falleció el sábado pasado en un ataque similar que tuvo lugar en el barrio de mayoría chií de Kadimiya, en el este de la capital iraquí.

Con las cinco nuevas bajas mortales de hoy, asciende a 3.934 el número de militares norteamericanos muertos en Irak desde que la coalición multinacional invadió y ocupó el país árabe, en marzo de 2003.