Nueve soldados de EE UU murieron ayer en un ataque suicida al estallar un coche bomba en su base en la provincia de Diyala, al noreste de Bagdad, informó el Ejército estadounidense. Según un comunicado, la explosión del coche bomba en el interior de la base causó heridas a otros 20 soldados.

Doce de los militares heridos volvieron a su destacamento, mientras otros ocho fueron trasladados a un hospital de la coalición militar internacional, según las fuentes.

Este es el atentado con mayor número de víctimas entre las tropas norteamericanas en un solo ataque en los últimos meses.

Las víctimas de este atentado pertenecían a la base de 'Lightining Force', de Diyala, a 65 kilómetros al nordeste de Bagdad.

Un grupo insurgente vinculado a Al Qaeda en Irak reivindicó el ataque suicida con coche bomba en el que murieron nueve soldados estadounidenses, en un comunicado colgado en una web islamista. El Estado Islámico de Irak, grupo que engloba a milicianos suníes entre los que figura Al Qaeda en Irak, afirma estar detrás del ataque.

Otro atentado suicida perpetrado con un camión-bomba se cobró ayer la vida de al menos 20 personas en la ciudad de Ramadi, a 100 kilómetros al oeste de Bagdad, según la policía de la localidad, que explicaron que además otras 30 personas resultaron heridas a consecuencia de la explosión en Ramadi, capital de la provincia de al Anbar.

Los agentes precisaron que el suicida detonó la carga explosiva cuando el vehículo transitaba junto a una patrulla de la policía en un mercado popular. En el atentado, que sucedió en el bario de al Bu Faray, perdieron la vida varios agentes. La fuerte explosión causó numerosos destrozos en los edificios y los locales comerciales de las proximidades.

El lunes, la explosión de dos coches bomba cerca de un restaurante popular de esta ciudad dejó otros 20 muertos y 28 heridos, según las últimas cifras ofrecidas por la policía.

En Faluya, al menos cinco policías iraquíes murieron por el estallido de un explosivo al paso de su patrulla, según fuentes policiales. La explosión causó heridas a otros dos agentes y dejó completamente destrozado uno de los vehículos del convoy policial.

Por otra parte, la explosión de un coche bomba cerca de un restaurante popular en el centro de esta localidad causó heridas a dos civiles, según las fuentes. El estallido no causó más víctimas debido a que los clientes del local huyeron del lugar momentos antes de la explosión tras sospechar que el vehículo podía ser un coche-bomba.

En Baquba, hombres vestidos con uniformes militares iraquíes mataron a seis personas e incendiaron cinco casas.