El zulo descubierto por la Dirección de Vigilancia del Territorio (DST, contraespionaje) estaba oculto en un garaje de la localidad de Clichy-sous-Bois (Seine-Saint-Denis), precisaron las fuentes.

El arsenal está compuesto por varios tipos de armas, entre las cuales había dos subfusiles de asalto, dos pistola y un fusil automático, así como explosivos (un kilo de TNT y 10 cartuchos de dinamita), municiones y 10 detonadores pirotécnicos y uno electrónico y de mecha lenta, añadieron.

Había también ropas de color negro, similares a las que utilizan los grupos de elite de la policía francesa, un uniforme de gendarme, pasamontañas, chalecos antibalas y una moto.

Este descubrimiento está relacionado con la detención llevada a cabo entre el lunes y ayer, miércoles, de 28 presuntos terroristas islámicos en la región parisiense y en el departamento de Oise (norte de París), de las cuáles una ha sido puesta en libertad, con lo que quedan 27 bajo custodia policial en la sede de la DST.

Todos ellos son sospechosos de pertenecer a una red de financiación del terrorismo islámico con robos a mano armada, que además podría haber planeado atentados en Francia.

Algunos de los detenidos han confirmado a los agentes su "compromiso islamista" y su voluntad "de financiar la causa", señalaron las fuentes.

Los investigadores piensan que el dinero de los asaltos a mano armada era invertido en pequeños comercios para poder blanquearlo.

El ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, afirmó ayer en la Asamblea Nacional (Cámara de diputados) que los detenidos "mantenían relaciones indirectas con el importante responsable que es Al Zarqaui", además de otros grupos como "el de Fráncfort, ex militantes del GIA (Grupo Islámico Armado), redes chechenas y, además, el grupo de Safé Bourada".

"La amenaza terrorista en Francia es, por desgracia, bien real", aseguró Sarkozy, que señaló que en lo que va de año 142 personas han sido detenidas en relación con el extremismo islámico y 31 de ellas fueron encarceladas.

"Está demostrado que algunas operaciones de la gran delincuencia destinadas a financiar la yihad estaban poniéndose en marcha: la permeabilidad entre el terrorismo y la gran delincuencia está perfectamente demostrada", dijo.

La red desmantelada ahora "está compuesta por individuos que aparecieron ya en otras investigaciones por asociación de malhechores con fines terroristas y por delincuentes comunes", informó el pasado lunes la Dirección Nacional de la Policía Nacional (DGPN) en un comunicado.

Fuentes de la lucha antiterrorista francesa calificaron la operación como una de las más importantes desarrolladas en Europa, en lo que respecta al número de detenidos, desde los arrestos practicados tras los atentados del 11 de marzo del 2004 en Madrid.

La orden de intervenir la dio el juez antiterrorista de París Jean-Louis Bruguiere en virtud de una comisión rogatoria por "asociación de malhechores en relación con una empresa terrorista".

Fuentes próximas a la investigación indicaron que la mayoría de los detenidos son hombres de edades comprendidas entre los 25 y 35 años, y de nacionalidad tunecina o argelina, aunque también hay algunos franceses.

Muchos de ellos, que se conocieron en prisión y estaban fichados por pertenecer al crimen organizado, son sospechosos de haber cometido robos a mano armada para financiar la causa islamista y otros de estar relacionados con redes de falsificación de documentos, según las fuentes