La resolución, que es apelable, fue adoptada por el juez Carlos Cerda, que en la investigación sobre el origen de la fortuna del ex gobernante golpista (1973-1990), calculada en veintisiete millones de dólares, le acreditó cuatro delitos.

El juez adoptó esta decisión después de haber realizado cuatro interrogatorios a Pinochet entre el 8 y el 17 de noviembre, con el fin de desenredar la intrincada red de sus manejos financieros en el exterior y tras declararlo mentalmente apto para afrontar un juicio.

El general retirado, que el próximo viernes cumple 90 años, fue notificado en su domicilio del acomodado barrio santiaguino de La Dehesa, por la funcionaria judicial Silvia Papas.

Pinochet está imputado en este caso por los delitos de evasión tributaria, falsificación de instrumento público, falsificación de pasaportes y omisión de bienes en su declaración jurada.