El titular francés de Interior, Nicolas Sarkozy, dijo ayer que ha regresado a este Ministerio, que ocupó de mayo de 2002 a marzo de 2004, para "limpiar Francia de los gamberros". "Estoy aquí para hacer mi trabajo y mi trabajo es limpiar a Francia de los gamberros", subrayó Sarkozy en una visita a Perpiñán (sur), su primer desplazamiento como ministro de Interior tras su nombramiento oficial. Sarkozy, que ostenta además el rango de 'número dos' del nuevo Gobierno de Dominique de Villepin, hizo esa afirmación en un encuentro con los comerciantes de una calle de Perpiñán donde se produjeron los peores altercados tras la muerte de un magrebí tras ser apelado por un grupo de gitanos el 22 de mayo.

Los graves incidentes se prolongaron hasta el pasado fin de semana cuando otro magrebí murió en la misma zona por disparos. Sarkozy prometió que los autores de estos crímenes irán a prisión y anunció que volverá a Perpiñán en septiembre próximo para "ver como va" la investigación y "pedir cuentas", tras lo cual algunos le gritaron: "clientelismo". El también presidente de la conservadora y gobernante UMP prometió la "tolerancia cero" frente a la violencia.