Rodrigo Hernández, medio centro de la selección española, admitió este sábado el "desánimo" y la "frustración" que provocó el empate contra Polonia en la Eurocopa 2020, pero apuntó que, "de toda la basura" que pueden tener "encima", su equipo depende de sí mismo para avanzar a octavos.

"Es un grupo engañoso. Los rivales no son nada fáciles, defensivamente son muy buenos, saben a lo que juegan y no nos han sorprendido nada. Son muy buenos equipos y van de tapados. Ante Eslovaquia es una final. De toda la basura que podemos tener encima ahora mismo, sacamos la poca parte positiva que dependemos de nosotros y nos queda una finalísima. Dependiendo de nosotros, teniendo la sartén por el mango, siempre hay esperanza", valoró en la zona mixta telemática desde el estadio La Cartuja de Sevilla.

"Evidentemente, el equipo está un poco desanimado ahora mismo, con una pequeña frustración y focalizaremos el partido que nos queda como lo que es, una final que tenemos que ganar. Dependemos de nosotros, estamos aquí en casa y si queremos pasar tenemos que ganar. El equipo se va a mentalizar, a trabajar bien y estoy convencido de que lo conseguiremos porque lo estamos dando todo para lograrlo", abundó el centrocampista.

Para él, "en condiciones normales", su equipo habría "ganado" los encuentros ante Polonia y Suecia. "Esperamos revertir la situación. Estoy convencido de que el equipo va a dar la vuelta a esta situación, porque nos lo merecemos y estamos haciendo las cosas bien", valoró.