El salario mínimo interprofesional (SMI) y los impuestos centraron ayer gran parte del debate sobre el empleo organizado por Murcia Sociedad Civil en el que participaron los partidos con opciones a entrar en la Asamblea.

Para Joaquín Segado, del Partido Popular, la subida del SMI se ha hecho desde la imposición y sin acuerdo y las consecuencias, que «pueden ser graves», se verán «a medio plazo». Emilio Ivars, del PSOE, recordó que los organismos que anunciaron un impacto económico negativo terminaron rectificando y afeó a Ciudadanos, que estaba en contra de esta medida, que en 2010 sí defendiera una subida del SMI «pero no a 900 euros, sino a más de mil». Javier Gil, de Ciudadanos, respondió que la subida del salario mínimo debe estar ligada a un tejido empresarial y a una economía fuerte que ahora no existe. Desde Podemos, Rafael Esteban se mostró «orgulloso» de que su formación «arrancara» esta subida al PSOE en las negociaciones de los presupuestos y preguntó al PP y Cs, aunque no obtuvo respuesta, si quieren rebajar el SMI. Juan Ignacio Cortés, de Vox, apostó por que los trabajadores cobren más «reduciendo el IRPF» y otros tributos porque «ahora les suben el salario mínimo para que luego les retengan más».

Los impuestos pasaron entonces a la primera línea del debate. Ivars se defendió de los candidatos del PP, Cs y Vox, que acusaron al PSOE de querer subir los impuestos y volver a instaurar el de Sucesiones en la Región, explicando que la bonificación del 99% de este tributo tan impopular que aprobó el Gobierno regional del Partido Popular supuso un ahorro de tan solo 28 euros de media para los contribuyentes. Pero 124 personas, los más ricos, se vieron exentos de pagar 121.000 euros cada uno. Quería demostrar así que se trata de un impuesto que afecta realmente solo a los que más poder adquisitivo acumulan. Desde Podemos invitaron al representante popular a que preguntara al presidente de Galicia, del PP, por qué no había quitado este tributo y subrayó que «impuesto que bajamos, deuda que aumenta». «Se paga dos veces por el mismo concepto. Es confiscatorio», apostilló Segado; y Cs reiteró que es un tributo «injusto».

La última medida del Gobierno de Sánchez en entrar en vigor, el control horario, también tuvo espacio en el debate. Segado acusó al PSOE de haber actuado «con improvisación y oportunismo»: «No ha tenido tiempo de adaptarse ni el propio Ministerio». Podemos asume que esta es una herramienta para controlar que no haya empleados con contratos a tiempo parcial que trabajen a tiempo completo y Cs criticó que esta herramienta no se adapta al siglo XXI.

Modelo productivo

Modelo productivoEn el bloque sobre el modelo productivo, Segado defendió la gestión del PP: «El éxito está en la diversificación en tres sectores: el industrial, la agricultura y turismo». Para Ivars, el modelo «genera desigualdad» y el PSOE apuesta por incorporar más ciencia e innovación. En Podemos proponen virar hacia un sistema en donde tenga más peso la inversión pública y el Tercer Sector y Ciudadanos propuso apoyar a las empresas a través de la disminución de burocracia y dotando al modelo de un «marco jurídico estable». En Vox ven necesaria una reducción del gasto público deshaciéndose de «cargos a dedo» y subvenciones.