El Comité para la Gobernabilidad que ha creado el Partido Popular tras las elecciones autonómicas y municipales comenzará a trabajar a partir del lunes con Ciudadanos para que los populares sigan dirigiendo el destino de la Región de Murcia, a pesar de haber perdido las elecciones. Para ello, además de Cs, tendrán que alcanzar un acuerdo con Vox.

Esta vez, la máxima de los populares de que «debe gobernar la lista más votada» de elecciones anteriores ha quedado en el olvido, pero solo en las autonómicas. En municipios como Murcia y Lorca, el PP sí que defiende que debe gobernar el partido que haya sacado más votos.

Ballesta, en minoría

El alcalde de Murcia en funciones, José Ballesta, reiteró ayer su intención de volver a dirigir el Ayuntamiento en minoría, como hizo en la pasada legislatura, aunque no se ha cerrado a otras posibilidades de diálogo con el resto de partidos que formarán la corporación municipal.

En declaraciones a los periodistas durante una visita a las obras de peatonalización de la avenida Alfonso X, Ballesta, que obtuvo 11 concejales en las últimas elecciones municipales de los 29 que forman la corporación, señaló que no ha mantenido aún ningún contacto con otros grupos ni estos le han transmitido propuestas.

«Hemos gobernado cuatro años con los concejales que teníamos», 12, por lo que esa será su «posición de partida», lo que «no quiere decir» que esté cerrado a otras posibilidades, al igual que ha estado «abierto al diálogo» durante toda la legislatura, subrayó.

Precisamente en el municipio de Murcia es en donde el Partido Popular puede sacar más pecho tras el resultado de los comicios, ya que consiguió ser la fuerza más votada, con 72.389 votos y a más de 12.000 de distancia del segundo, el Partido Socialista.

Incluso, el 'efecto Ballesta' consiguió que hubiera más de 7.000 murcianos que el 26 de mayo votaran al Partido Popular en las municipales pero que no lo hicieran en las autonómicas -el PP regional sólo ha alcanzado los 65.379 en esta localidad-, donde el presidente en funciones Fernando López Miras iba de cabeza de lista.

El análisis de los sufragios del 26M por barrios y calles murcianas demostró, además, que el candidato a la Alcaldía de Murcia del PP arrasó en el centro de la ciudad. En concreto, se tiñó de azul todo el área que comprende la Plaza Circular y la Catedral. Tan solo algunas zonas de la capital del Segura como el barrio de Vistabella y, algo más alejados del centro, el barrio de San Basilio, El Ranero y Santiago El Mayor -donde residen los vecinos que se levantaron contra la llegada a Murcia del AVE en superficie-, optaron por otra formación política, el Partido Socialista.

El candidato del PSOE José Antonio Serrano ya anunció su intención de comenzar una ronda de contactos con el fin de evitar otros cuatro años de legislatura con el PP. Son más de 24.000 votos los que obtuvieron los socialistas con respecto a 2015, que les proporcionan tres concejales, pasando de seis a nueve ediles. Además, el PSOE ha ganado en 15 pedanías, en 8 por mayoría absoluta, y «en las que no hemos ganado hemos subido en votos, como Cabezo de Torres, donde hemos logrado más de 400 votos con respecto a las anteriores elecciones y, por tanto, un vocal más».

Con estos resultados, Serrano necesitaría atraer los votos favorables de Cs, que ha perdido un concejal en las elecciones, y Podemos, que ha entrado con dos concejales (aunque Ahora Murcia, ya extinto, tenía tres concejales y Cambiemos Murcia ha quedado fuera de la Corporacón).

Negociaciones en Lorca

El alcalde de Lorca en funciones, Fulgencio Gil, afirmó este viernes que después de los contactos mantenidos con los representantes del resto de formaciones políticas, seguirá negociando para conseguir que el municipio sea gobernado por el Partido Popular, que ha sido quien ha ganado las últimas elecciones municipales celebradas el 26M.

En este sentido, insistió en que seguirá intentando recabar para ello los apoyos necesarios.

Gil reconoce que los contactos a partir de ahora con Vox y Ciudadanos «los llevaremos a cabo de manera discreta», pero insiste en que va a seguir hablando con los grupos municipales para que Lorca sea gobernada por el Partido Popular.