Ciudadanos se va a hacer de querer. La candidata a la presidencia de la Comunidad Autónoma, Isabel Franco, eludió ayer pronunciarse sobre posibles pactos, cuando con el 95% de los votos escrutados, salió a hablar al más de medio centenar de simpatizantes y afiliados que se congregaron en el hotel NH Amistad para ver los resultados de las elecciones autonómicas en la Región de Murcia.

Al filo de la 1 de la madrugada, Ciudadanos se mantenía en una foto fija de 6 diputados a la Asamblea Regional, aunque algunos esperaban arrañar el séptimo escaño a Vox. Pero al final no lo consiguió.

Cuando Franco habló, el resultado era de 17 escaños para el PSOE, 16 para el PP, 6 para Cs -cuatro más que en las elecciones autonómicas de 2015-, 4 para Vox y 2 para Podemos. Es decir que Ciudadanos y PSOE podrían gobernar con la mayoría absoluta.

De los resultados, Isabel Franco destacó que «Ciudadanos ha crecido en la Región de Murcia, y ese mandato lo acatamos». A partir de ese momento, dijo, «nos vamos a poner a trabajar porque en nuestro ADN está el diálogo y el consenso».

La candidata apuntó que iban a explorar todas las posibilidades para entrar en el Ejecutivo autonómico con «aquel o aquellos partidos con los que podamos gobernar».

«Ha sido una experiencia magnífica y ahora comienza una etapa apasionante», subrayó sin querer desvelar hacía dónde podría inclinarse el sentido de su pacto.

En los corrillos, sin embargo, se comentaba que «si el PSOE logra los 17 escaños, ya tenemos Gobierno». Lo que finalmente ocurrió tras una emocionante pugna con el Partido Popular.

La aspirante a la presidencia del Gobierno regional entró arropada por los otros cinco candidatos de la lista que han logrado un escaño en la Asamblea Regional: Juan José Molina (número 2), Ana Martínez Vidal (nº3), Alberto Castillo (que figura en el número 4 de la lista como Independiente), María del Valle Miguelez, número 5 y Francisco Álvarez, número 6. Sólo Juan José Molina repite en la Asamblea.

Horas antes, y pasadas las 21.30 horas, los salones del primer piso del hotel NH Amistad de Murcia se tiñeron de naranja, con globos naranjas por el suelo. Candidatos, afiliados y simpatizantes llegaban con cuentagotas.

El candidato número 2 a la Asamblea Regional, Juan José Molina, se mostraba muy optimista con los resultados que iban a obtener en estas elecciones. «Van a ser magníficos, estamos seguros de que lograremos más del doble de diputados que en las pasadas». Eso suponía pasar de 4 a más de 8. Molina subrayó que a partir de esa noche «se iba a producir un cambio en la Región, pues pase lo que pase no va a haber mayorías absolutas y va a haber que negociar».

Ya entonces, y pese a saber que los pactos iban a ser imprescindibles, todo el mundo se mostraba cauto a la hora de hablar de posibles pactos.

Alberto Castillo, candidato número 4 a la Asamblea Regional, que se presenta como independiente, y que se estrena en política, manifestó que «las ilusiones están intactas» y «tenemos claro que vamos a ser claves para formar el Gobierno regional».

Castillo vaticinó que iba a ser «una noche muy larga y en continuo sobresalto», como así sucedió.