El PSOE ha sido el partido más votado en la Región de Murcia en las elecciones autonómicas celebradas este domingo, aunque aventaja solo en unos 500 votos al PP. La candidatura encabezada por Diego Conesa ha conseguido el apoyo de 211.000 electores, que le dan 17 escaños en la Asamblea Regional, mientras que el ya presidente en funciones y candidato del Partido Popular, Fernando López Miras, ha sacado 16, seis menos que hace cuatro años. El escaño de la victoria fue bailando de uno a otro al final del escrutinio, por lo que no se supo quién era el ganador hasta el último momento. Ciudadanos ha logrado seis diputados, dos más que hace cuatro años y que, sumados a los del PSOE, serían suficientes para alcanzar la mayoría absoluta (23).

Vox entra en la Asamblea Regional por primera vez con cuatro escaños, mientras que Podemos se derrumba y pierde cuatro de los seis asientos que tenía en la anterior legislatura.

El PP había ganado todas las elecciones autonómicas en la Región con mayoría absoluta desde 1995 hasta 2015, cuando la candidatura encabezada por Pedro Antonio Sánchez consiguió 22 escaños, uno menos de los necesarios para la mayoría absoluta. Gracias al apoyo de Ciudadanos han gobernado desde 2015, pero para seguir en San Esteban el ya presidente en funciones y candidato del PP necesitaría la muleta de Vox.

Los populares ya habían perdido frente al PSOE en las elecciones generales de abril por 10.000 votos. En los comicios de este domingo ambos partidos han mejorado los resultados del pasado 28A y se han acercado a las 210.000 papeletas, por lo que el voto de los emigrantes será decisivo en esta ocasión.

La candidatura encabezada por Diego Conesa ha conseguido una victoria por la mínima en las elecciones autonómicas, que le han permitido lograr 17 escaños, cuatro más que en la anterior legislatura.

El PSOE podría formar gobierno si logra el apoyo de Cs, que ha sacado seis diputados, con cerca de 78.000 votos (12%).

Por otra parte, una coalición de derechas como la alcanzada en Andalucía entre el PP y la formación naranja exigiría también el apoyo de Vox.

La participación en estos comicios se ha situado muy por debajo de la alcanzada en las generales del pasado 28 de abril, aunque la afluencia a las urnas ha sido prácticamente la misma que hace cuatro años y se ha situado en torno al 63,7%. Las dos campañas electorales consecutivas que se han celebrado esta primavera han impedido a los partidos mantener la tensión en el electorado generada tras el pacto del PP y Ciudadanos con el apoyo de Vox en Andalucía.

La tardanza del escrutinio hizo bailar el resultado a lo largo la noche y aportó un suspense añadido al seguimiento electoral, que nunca antes había resultado tan lento. El hecho de que el recuento del voto autonómico no pudiera iniciarse hasta que estuvieran escrutadas las papeletas de las elecciones al Parlamento europeo alargó el proceso con un goteo exasperante.

Las elecciones de este domingo se celebraban por primera vez con una circunscripción única, que evita la pérdida de votos a las formaciones políticas con menor representación.

La reforma de la Ley Electoral de la Región también ha rebajado del 5% al 3% el mínimo de votos necesarios para poder conseguir escaño en el Parlamento autonómico. Con los primeros resultados del escrutinio parecía que podía conseguir varios diputados la formación municipalista de Cartagena MC-CCD, que finalmente no llegó a entrar

Tampoco los candidatos de Somos Región, Alberto Garre, y de Cambiar la Región (IU), José Luis Álvarez-Castellanos, han conseguido entrar en la Asamblea Regional.

Vox, que obtiene representación en la Asamblea por primera vez, saca cuatro escaños y se convierte en la cuarta fuerza política. Con cerca de 59.000 votos, roza el 9,5%

Podemos ha perdido dos terceras partes de los escaños que tenía en la anterior legislatura y se ha quedado con apenas dos diputados. De los 84.500 votos que alcanzó hace cuatro años apenas ha conservado 34.550, que le dan el 5,5%.