Pedro Antonio Sánchez compareció públicamente ayer por primera vez desde la noche electoral para, ya en frío, analizar los resultados de las elecciones del 24M y el nuevo mapa político que se ha configurado en la Región tras veredicto de los ciudadanos. El candidato del PP, que estuvo acompañado por 19 de los 21 los diputados electos populares que han salido de las urnas en las elecciones (solo faltaron Encarna Guillén y Domingo Segado), sacó pecho por el resultado electoral, recordando que le ha sacado casi 100.000 votos a la segunda fuerza política (el PSOE) y reivindicando que es a él al que le corresponde llevar la iniciativa para constituir el futuro Gobierno regional.

Sánchez es consciente de que, al quedarse a las puertas de la mayoría absoluta, necesitará dialogar, y mucho, con los otros partidos (PSRM, Podemos y Ciudadanos), tanto para ser investido presidente de la Comunidad como para poder aprobar sus proyectos más importantes en la Asamblea Regional. Y está dispuesto a ello. El líder popular anunció que la Junta Directiva Regional, el máximo órgano del PP entre congresos, se reunirá el próximo sábado para analizar los resultados y la nueva situación política, así como para crear una comisión formada por personas de su confianza que se encargará de fijar las estrategias de negociación con el resto de partidos tanto a nivel municipal como autonómico. Y es que el PP no solo necesita acuerdos con otras fuerzas políticas para mantener la Comunidad Autónoma, sino también para gobernar en 22 ayuntamientos en los que fue la fuerza más votada en las elecciones pero sin mayoría absoluta. En esta situación se encuentran las cuatro ciudades con más población de la Región: Murcia, Cartagena, Lorca y Molina de Segura.

Pedro Antonio Sánchez anunció que se abre «una nueva etapa en la política regional» y adelantó que la que comienza será «la legislatura más reformista de la historia de la democracia». Señaló que a partir del lunes comenzará una ronda de contactos con los partidos que han obtenido representación en la Asamblea, llamando primero a los socialistas por ser el segundo partido en número de votos, «aunque con 4.000 menos que en 2011», precisó. «La única línea roja para el PP es el interés de los murcianos», advirtió el aspirante a presidente.

Pese a su intención de dialogar con PSOE y Podemos, el partido con el que el PP tiene más posibilidades de ponerse de acuerdo es Ciudadanos, que el martes hizo público un documento con las condiciones que tendrán que cumplir los partidos que quieran pactar con ellos. Entre esas exigencias, además de la tolerancia cero con los imputados, figuraba la de elegir a sus candidatos mediante primarias (aunque ayer se matizó), algo que no se contempla en los estatutos del PP. «Debe ser la comisión que se va a crear el sábado la que lleve las negociaciones, pero no se podrán tomar medidas sin estar bajo el paraguas de la dirección nacional, no puede ser que en una región se haga y en otra, la contraria», afirmó el candidato, quien confesó que el único de sus rivales del 24M que lo ha llamado tras las elecciones ha sido César Nebot, de UPyD. No se quiso pronunciar sobre las palabras del delegado del Gobierno en la Región, Joaquín Bascuñana, imputado en el caso Novo Carthago, en las que afirmó que no se plantea dimitir para facilitar el pacto entre PP y Ciudadanos.

Pedro Antonio Sánchez indicó que las negociaciones que llevarán a cabo «serán transparentes» y los acuerdos que se puedan alcanzar «se harán públicos». Además, aseguró que el diálogo se basará «en las cosas que les interesan a los murcianos, como el empleo, el agua, la financiación autonómica, la calidad educativa, la bajada de impuestos, y no en las cosas que solo nos interesan a unos pocos, como el reparto de sillones y poder. A eso no le vamos a dedicar ni un segundo», dijo.

Nuevas elecciones

La Ley del Presidente contempla que si dos meses después de la primera votación de investidura sigue sin haber un jefe de Gobierno, el presidente de la Asamblea puede disolver la Cámara y convocar nuevas elecciones autonómicas. «En estos momentos no se descarta nada», afirmó Sánchez al respecto. En algunos sectores del PP regional se va extendiendo poco a poco esta idea de repetir los comicios, ya que existe la teoría de que ha faltado una semana de campaña electoral para que el efecto Ciudadanos se desinfle definitivamente en la Región y conseguir la mayoría absoluta. No obstante, el líder regional añadió que la opción de celebrar nuevos comicios porque los partidos no son capaces de ponerse de acuerdo, como está sucediendo en Andalucía, «sería una irresponsabilidad y, desde luego, no es lo que quieren los murcianos».

Pedro Antonio Sánchez criticó además «el ansia de poder de algunos», en referencia al anuncio que realizó este martes el secretario general del PSRM, Rafael González Tovar, sobre su intención de abrir un proceso de diálogo con Podemos y Ciudadanos (entre los tres superan al PP en número de escaños en la Asamblea) para formar un Gobierno del cambio y mandar a los populares a la oposición después de 20 años. «Debe gobernar la lista más votada. Los murcianos no entenderían un tripartito», sentenció el vencedor de las elecciones del 24M.