El candidato del PP a presidir la Región de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, dijo hoy que, tras los comicios del domingo, "se abre una nueva etapa política en la Región". Sánchez, acompañado de los otros 21 diputados del PP que han obtenido cada uno un escaño en el Parlamento autonómico, convocó una rueda de prensa en la sede de su partido, ubicada en la calle González Adalid de la capital murciana.

Valoró que le ha sacado 100.000 votos a la siguiente candidatura. Asimismo, señaló que él ofrece a la Región "esfuerzo, trabajo y honradez".

El candidato del PP a presidir la Región de Murcia promete "transparencia completa y diálogo permanente en busca de consensos" si finalmente llega a San Esteban.

Asegura que no tiene enemigos ni adversarios políticos, y que tiende la mano a "todo el mundo" para que "la Región no pierda cuatro años".

"Esta será la legislatura más reformista de la historia de la Región de Murcia", aseveró. A este respecto, sentenció que "todas las negociaciones serán transparemte y todos los acuerdos serán públicos".

Admitió que "los murcianos quieren un gran cambio", y añadió que ellos, desde el PP, "estamos dispuestos a llevarlo a cabo, reconociendo nuestros errores". Subrayó que ha de gobernar "el partido mayoritario", en este caso el suyo. A su juicio, "los murcianos no quieren un tripartito".

"Percibo en algunos el ansia de poder que nosotros no tenemos", señaló. Agregó que sólo UPyD le ha llamado para felicitarle tras los comicios".

Anunció que el PP va a crear una comisión para fijar la estrategia de las negociaciones a nivel local y regional, y no descarta otros comicios anticipados, si no hubiese acuerdos. "La única línea roja para el PP es lo mejor para Murcia", comentó.

También dijo que sí ve a Rajoy como el candidato a la presidencia del Gobierno central.

Sobre Joaquín Bascuñana, imputado en el caso Novo Carthago, apuntó que él no quiere valorar sus declaraciones, en las que dijo que no dimitirá.