El presidente de Anpier, el murciano Miguel Ángel Martínez-Aroca, se lamentó ayer ante los inversores en energía fotovoltaica y los candidatos de los partidos que asistieron al debate de que la rebaja de las primas que les prometió el BOE y la reforma del Gobierno de Rajoy, que liga las retribuciones de la energía fotovoltaica a la cotización de los valores del Estado, les condena a desear que suba la prima de riesgo. «Lo único que puede desear un productor foltovoltaico es que al país le vaya mal y que el valor del bono español se dispare», explicó.