Airbus gana 4.247 millones en 2022, su máximo histórico, tras crecer un 1%

Airbus registró un beneficio neto de 4.247 millones de euros en 2022, un 1% más que el año anterior, por lo que se convierte en el nuevo máximo histórico para la compañía.

La "sólida" evolución financiera experimentada por el fabricante aeronáutico en 2022 ha llevado a la compañía a aumentar el dividendo con respecto al año anterior, hasta los 1,8 euros por acción.

Sin embargo, no ha conseguido cumplir con las 720 entregas de aviones comerciales previstas para el año, alcanzando tan solo 661, un 8,2% más que en 2021. "Es frustrante", ha admitido el consejero delegado de la compañía, Guillaume Faury, durante la rueda de prensa celebrada este jueves en Toulouse.

"Airbus ha tenido que adaptarse a un entorno complejo, particularmente adverso en materia de suministros, lo que ha provocado que entreguemos menos aviones de los que planeamos", ha subrayado haciendo alusión a los problemas socioeconómicos globales derivados de la guerra entre Rusia y Ucrania, así como la inflación y la crisis energética.

Las ventas crecen un 13%

El resultado neto de explotación (Ebit) reportado en 2022 fue de 5.325 millones de euros, sin apenas cambio frente a los 5.342 millones del año anterior.

Los ingresos alcanzaron los 58.763 millones, un 13% más que en 2021. El flujo libre de caja consolidado fue de 4.324 millones de euros, un 1% por encima del ejercicio anterior, mismo crecimiento que registra el beneficio por acción, que se sitúa en 5,4 euros.

El dividendo de 2021, de 1,5 euros por acción y 1.200 millones en total, se abonó en el segundo trimestre de 2022, mientras que las aportaciones a las pensiones ascendieron a 600.000 euros durante el ejercicio. A 31 de diciembre, el número de empleados de la compañía era de 134.267, un 6% más.

La posición de tesorería bruta al final de 2022 se sitúo en los 23.600 millones de euros (+3,9%), con una posición de tesorería neta consolidada de 9.400 millones de euros (+22%). El valor de la cartera de pedidos a final de año era de 449.241 millones de euros (+13%).

Complejidad para 2023, pero buenas previsiones

Faury ha manifestado que 2023 comienza también con "complejidad". La compañía prevé obtener en el presente año un Ebit ajustado de unos 6.000 millones de euros, con un flujo de caja libre antes de fusiones y adquisiciones de 3.000 millones de euros.

Además, vuelve a proyectar la entrega de 720 aviones comerciales a lo largo de este año, al mostrarse optimista ante la recuperación del tráfico aéreo y la necesidad de las aerolíneas de reforzar sus flotas de largo radio.

En materia de estrategia empresarial, Airbus ha colocado como prioridad su transformación a largo plazo, aumentando su capacidad mensual de producción y poniendo el foco en nuevas tecnologías que lideren la transformación sostenible del sector.

Más de 1.000 pedidos de aviones comerciales

Airbus recibió en 2022 un total de 1.078 pedidos de aviones comerciales, un 38% más que el año anterior y los pedidos netos después de cancelaciones fueron de 820 aviones (+61,7%).

La cartera total de pedidos a finales de 2022 era de 7.239 aviones comerciales (+2%), lo que supone una cifra total de 390.456 millones de euros (+13%).

El Ebit ajustado correspondiente a la producción de aviones comerciales aumentó a 4.600 millones de euros, un 29% más, un crecimiento que responde a un mayor número de entregas (661).

El fabricante ha previsto reforzar el programa de la familia A320 en los próximos años. El objetivo es alcanzar el ritmo de producción mensual de 65 aviones a finales de 2024 y de 75 en 2026. Por otro lado, la entrada en servicio del A321XLR está prevista para el segundo trimestre de 2024.

En cuanto al A330, su tasa de producción mensual aumentó a 3 a finales de 2022 y la compañía se ha marcado el objetivo de alcanzar los 4 para 2024. El A350 se produce en este momento a un ritmo de 6 aviones, pero la compañía espera alcanzar los 9 para finales de 2025, en línea con el aumento de la demanda de aviones de cabina ancha.

El Ebit de 'defence and space' cae a la mitad

La división de Airbus Defence and Space registró un Ebit ajustado de 384 millones de euros, un 45% por debajo del resultado de 2021. La compañía achaca este descenso a la pérdida de dos satélites Pleiades Neo en diciembre y a los retrasos en el lanzador Ariane 6.

Faury ha valorado estos datos como "decepcionantes para la compañía" y ha explicado cómo la guerra en Ucrania y sus consecuencias han pasado factura a la industria espacial.

"Ahora Europa tiene el reto de acceder al espacio de manera independiente", ha dicho, haciendo hincapié que los países europeos deben "estar unidos" en esta materia".

No obstante, estos efectos se vieron compensados por un mayor volumen en Military Aircraft, el crecimiento del Eurodrone y el efecto positivo de las obligaciones de retiro.

Airbus continúo trabajando para cumplir con la hoja de ruta del programa A400M. En 2022 se realizó una actualización de las estimaciones para la finalización del contrato que incluía un cargo de 500.000 euros que incluyen supuestos como la inflación.

La división obtuvo 13.660 pedidos en 2022, sin cambios frente al año anterior, y su cartera total de pedidos ascendía a finales de año a 38.426, un 6% más, valorada en 47.242 millones de euros (+10%).

En cuanto a Airbus Helicopters, su Ebit ajustado en el año aumentó un 19%, hasta los 639 millones de euros, con 9.338 pedidos recibidos (+9%) y una cartera de pedidos totales de 20.774 (+16%).

Aumenta su beneficio un 6% en el cuarto trimestre

La compañía registró un beneficio neto de 1.679 millones de euros en el cuarto trimestre (+6%), con un Ebit declarado de 1.773 millones de euros, un 7% menos.

Los ingresos netos del cuatro trimestre aumentaron un 21%, hasta los 20.644 millones de euros, de los que 14.774 millones provenían de la división comercial.

La división de Helicópteros ingresó 2.533 millones de euros (+7%) y la de Defence and Space alcanzó los 3.666 millones, un 11% más que en el mismo periodo del año anterior.

Recibe la aprobación de sus objetivos de reducción de emisiones

Airbus ha recibido la aprobación de sus objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a corto plazo por parte de la iniciativa Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi, por sus siglas en inglés). Esto supone que los objetivos marcados por la compañía van en consonancia con las estimaciones de la ciencia y del clima.

Los objetivos de Airbus son reducir las emisiones industriales de alcance 1 y alcance 2 hasta un 63% para 2030, así como reducir un 46% la intensidad de las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por los aviones comerciales en servicio para 2035, en ambos casos tomando como referencia los datos de 2015.

Faury ha esgrimido que Airbus está comprometido con "liderar la descarbonización del sector aeroespacial" y a invertir en soluciones que ayuden a garantizar que la aviación pueda seguir "desempeñando su valioso papel en la sociedad".

En esta línea, preguntado sobre el desarrollo de aviones propulsados por combustible de aviación sostenible (SAF, por sus siglas en inglés) o por hidrógeno, Faury ha destacado que "no están compitiendo"

"No es un SAF o hidrógeno, sino SAF e hidrógeno", ha remarcado, matizando que ambos sistemas se complementan. El SAF "es absolutamente necesario para el futuro de la aviación", pero el hidrógeno es la forma a largo plazo para descarbonizar el sector.